Recetas
Tres recetas con alcachofas en plena temporada
Con almejas, en una tostada con muchas cosas más y al horno con nata, queso y pimentón

Publicado el 01/11/2022 a las 06:00
Las verduras también sufren la dictadura de la belleza. A ellas no les ponen pendientes al nacer, ni les bombardean con anuncios de cremas y fajas desde que tienen uso de razón, pero la sociedad les obliga a ser bonitas. Y eso es agotador. Bien lo sabemos quienes soñamos con ir en chándal todo el día. La Blanca de Tudela es nuestra chica. La alcachofa que nuestros agricultores miman sabiendo su valor. Es la reina de Navarra y también la de muchos lugares que envidiosos intentan emular nuestra huerta. ¿Qué le pasa a nuestra alcachofa? Que es tan auténtica y tan natural que no aguanta perfecta muchos días. Es imposible hacerlo sin ayudas extras. ¿Sigue siendo igual de rica? sí, pero por fuera empieza a perder esplendor. Ahí le adelanta por la derecha su prima la alcachofa híbrida. Ella aguanta más tiempo sin que se le corra el maquillaje, así que cuando encienden las luces de la discoteca es ella quien más brilla, Pero es eso, solo maquillaje. Nuestra Blanca de Tudela sigue siendo infinitamente mejor, solo que ha bailado y ha reído tanto que no hay resto de colorete. Somos los consumidores quienes tenemos que cambiar el chip. Quienes tenemos que elegir la alcachofa de casa, no por ser de casa, si no porque es objetivamente más rica. ¿Se oscurece antes? Sí ¡y qué más da si sigue siendo deliciosa! Llegamos el otro día a la conclusión mis amigas y yo de que les hemos dado más oportunidades de las que merecían a tipos mediocres solo porque eran guapos. ¿Pero qué mierda es esta? ¡¿Qué mérito tiene eso, por dios?! Yo quería dejarles pero me miraban con esas facciones perfectas y claro... No me juzguen por haber nacido en esta sociedad guapicentrista! ¡Soy una víctima más del sistema! Eso sí, no cometeré el mismo error con las alcachofas, no no. Querida Blanca de Tudela, yo te quiero por tu interior. A mí no me la cuelan más.
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