Cuando los tomates saben a tomate

En casa de los Nahum son días de alegría. La planta tomatera que compró mi padre ha dado sus frutos, en el sentido más literal de la expresión, y está el hombre tan contento como cuando fue abuelo. Y no es para menos, no sólo nos ha sobrevivido una planta si no que encima ¡ha florecido! Fiesta nacional en el edificio. No somos muy de naturaleza nosotros, no. No se nos dan bien estas cosas del campo, para qué engañarnos. Nací rodeada de frases como: ¿El monte? ¿Ese sitio donde los animales están crudos? Sí, somos más de asfalto. Así que la temática de las tres recetas de hoy estaba clara, tenía que ser un homenaje al hito de la temporada. Además, que es ahora cuando los tomates saben a lo que tienen que saber, no esos plásticos que nos venden en los supermercados durante el resto del año. Gazpachos, salmorejos, ensaladitas frescas... definitivamente es su época. Los rellenos los hice porque tenía antojo de la mezcla del cuscús con el beicon y los dátiles y me apetecía presentarlos así, tan monos para la foto. Se pueden tomar en caliente, aunque para estos calores infernales con los que el cambio climático nos está dando un colleja para que espabilemos, apetece más tomarlos fresquitos. Y así me despido hasta septiembre. Ya os dije la semana pasada que odio las despedidas así que disfrutad del verano, cocinillas, comed mucho, bebed más , pasead, escribid cartas, abrazad, besad y todos los imperativos acabados en d que se os ocurran, menos adelgazad. Eso lo dejamos para la vuelta. ¡Sed felices! Es una orden... Tomates rellenos de cuscus INGREDIENTES 2 tomates grandes 2 tacitas de cuscús 2 tacitas de agua beicon dátiles alcaparras mantequilla sal Paso 1: Cortamos la parte de arriba del tomate con la ayuda de un cuchillo muy afilado. Lo hacemos a modo de tapa y reservamos. Paso 2: Vaciamos el tomate por dentro con mucho cuidado de no romperlo. Lo necesitamos para usarlo como recipiente. Paso 3: Lo vaciamos por dentro. Yo comencé haciéndolo con un cuchillo y acabé con las manos que me resultó más sencillo. Reservamos la pulpa. Paso 4: Hacemos el cuscús siguiendo las instrucciones del fabricante. Yo pongo a hervir el agua y la echo sobre el cuscús y tapo el bol con un paño durante 5 minutos. Luego le echo mantequilla para engrasarlo. Paso 5: Mezclamos el cuscús con el beicon hecho en la sartén, los dátiles cortados, las alcaparras, el tomate en daditos... y lo que se nos ocurra. Y rellenamos con esto los tomates. Ensalada de tomate con guindilla A veces me da un poco de vergüenza publicar ciertas recetas porque son tan sencillas que me parecen un poco estafa pero es que las mejores recetas son esas, las sencillas. Y me consuelo pensando que son combinaciones que igual no se os habían ocurrido. ¿Tomate con guindilla? No, Sara, no se nos hubiera ocurrido nunca... Ya, bueno, pues yo esta ensalada no la había probado nunca y me sorprendió por rica y ale, aquí la tenéis... Yo todo lo que me sorprende lo comparto, que nunca se sabe dónde podéis encontrar el plato de vuestra vida. Aquí el aliño es fundamental así que importante hacer una vinagreta rica. Y hacerla con amor. INGREDIENTES Tomates cebolla dulce guindillas ventresca Para la vinagreta: aceite de oliva virgen extra, vinagre y sal Timbal de tomate, mango, aguacate y langostinos Fresco, bonito, sencillo y con cientos de posibilidades ¿qué más se le puede pedir a un plato? La vinagreta es fundamental. INGREDIENTES 3 tomates 1 mango 2 aguacates 12 langostinos Orégano para terminar LA VINAGRETA: aceite de oliva virgen extra vinagre balsámico y sal Paso 1: Picamos los tomates en cuadraditos pequeños. Yo no los pelé pero si os incomoda la piel podéis escaldarlos unos segundos con una cruz en el extremo y luego será muy sencillo. Paso 2: Pelamos el mango y lo cortamos también en cuadraditos de tamaño parecido. Y hacemos lo mismo con el aguacate. Paso 3: Si queremos ponerlo por colores será mejor que reservemos todo en platos aparte. Paso 4: Los langostinos tienen que ir cocidos así que si no los hemos comprado ya hechos tendremos que cocerlos en agua con sal. Una vez hechos los pelamos y podemos pasarlos un poco por la sartén con un chorrito de aceite de oliva. Siempre tendrán más sabor hechos así. Paso 5: Hacemos la vinagreta mezclando el aceite, el vinagre y la sal y batiendo bien. Emplatado: Con la ayuda de uno de los moldes redondos vamos poniendo pisos de tomate, mango y aguacate, coronando los langostinos. Y aliñamos por encima con la vinagreta y un poco de orégano, si nos gusta. ¡Y a disfrutar!

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