Edición impresa

Actualidad Navarra, Pamplona, Tudela, Estella, Osasuna, Deportes, Gobierno de Navarra, Ayuntamiento de Pamplona, Política, Economía, Trabajo, Sociedad.

Galardones

Pedro Salaberri entra con emoción en el club de los Príncipes de Viana

María Chivite entrega el galardón al pintor pamplonés en Sangüesa

Publicado el 18/06/2022 a las 20:11
Un pequeño detalle, cuando Pedro Salaberri leía el último párrafo de su discurso, reveló que este sábado no era tan normal como parecía para el pintor pamplonés. Salaberri ya había recogido para entonces el premio Príncipe de Viana de la Cultura de 2022 de manos de la presidenta María Chivite. Fue vestido como siempre, con una camisa azul de cuadros, y se le veía feliz, riendo y abrazando a tantos amigos que quisieron acompañarlo. Tranquilo. Pero ya estaba leyendo su discurso de agradecimiento cuando se conmovió y tuvo que parar brevemente. “Yo quería salir de esto vivo pero ha llegado Mari Carmen [su mujer] a las letras y se me ha venido la emoción encima, no me importa porque creo que se lo merece”, explicaba después del acto.
La ceremonia de entrega tuvo lugar este sábado por primera vez en Sangüesa, en la plaza General los Arcos, con motivo del 900 aniversario de la localidad. La temperatura se mantuvo en torno a los 40 grados pero la carpa que instaló el Gobierno de Navarra para la entrega, así como los abanicos y los botellines de agua que se repartieron, consiguieron que la Cruz Roja no tuviera que intervenir por ningún golpe de calor. Allí se dieron cita representantes de la cultura, la política, las instituciones, universidades y amigos y familia del pintor. La coral Nora de Sangüesa abió el acto con el Himno de Navarra e intercaló después Ilunabar y La jota vieja de Sangüesa. En contraste con el año pasado, apenas se pudieron contar dos o tres mascarillas.
Salaberri aprovechó el premio para girarse y observar los 75 años -55 con pinceles- que precedían a ese momento. Situó el inicio del camino a los 14 años, cuando empezó a trabajar en un estudio de arquitectura y la pintura llegó como soporte para expresarse y dirigirse a los demás sorteando la timidez. A los 18 se matriculó en la Escuela de Artes y Oficios. “Poco a poco vi que había entrado en la cueva, o en el palacio, de las maravillas”, señaló. En aquella época sin libertades la Escuela supuso un oasis mental para él. Allí encontró además a amigos y a la que es su mujer. Paralelamente, había empezado a salir al monte con sus hermanos, donde encontró la experiencia “maravillosa y pacificadora” de la belleza de la naturaleza. “Al universo no le afectaban las luchas políticas, ni lo transitorio de nuestras vidas o lo obsesivo de nuestros afanes”, apuntó ayer. “Esas vivencias tan intensas quise contarlas en mis cuadros para animar a otras personas a que disfrutaran de aquello que amábamos, aunque no lo mitificábamos”, explicó. Fue así desarrollando un modo de vida en el que pintaba en la ciudad lo que vivía en los montes. “Con la pintura mi empeño era el de parar el tiempo, que la belleza que me emocionaba se fijara, permaneciese”, admitió.
Y luego está la vertiente pública. Salaberri señaló que ha sido empeño suyo formar parte del tejido cultural de la sociedad en la que vive. Habló de sus amistades - “la universidad más prestigiosa y fértil que se puede tener”- y citó a varios compañeros, en especial a Pedro Manterola. También tuvo un recuerdo para el mundo del teatro y las escenografías en las que ha trabajado. “En suma, mi estudio siempre ha sido el espacio en que mejor me imagino el mundo”, dijo. “Pero salir de él para colaborar con otros lo hace más amplio, más variado y más interesante”, declaró, antes de dar las gracias a su familia y quebrársele la voz.
Minutos después se mostraba contento. “Estar rodeado de gente que te quiere y de personas que te dicen que les gusta lo que haces no puede ser más que motivo de alegría, si hay algún enemigo no ha venido”, resumía antes de irse a comer con un grupo de amigos al Veinte de Sangüesa.


María Chivite se propone liderar un “despertar cultural”

Cerró la entrega la presidenta del Gobierno de Navarra con un discurso que recordó el año 1122, fecha en la que Alfonso I, rey de Pamplona y Aragón, extendió el fuero otorgado a Jaca al Burgo Nuevo de Sangüesa, siendo este el nacimiento de la ciudad. Un hecho sucedido hace 900 años, motivo de la elección de la ciudad como lugar de la entrega. La plaza General los Arcos, decorada con pendones, celebraba así el aniversario. Chivite destacó el afán del rey por “generar progreso a través de la cultura” además de una puesta de la tradición como guía para la innovación y el progreso. Además, la presidenta hizo balance de la situación actual de la cultura en Navarra y aseguró que “nos enfrentamos a un punto de inflexión histórico”. Añadió el compromiso del Gobierno de Navarra por la cultura y la celebración del 50 aniversario de los Encuentros de 1972, la decisión de la Diputación de negar ayuda al festival y desechar la iniciativa de Alexanco y De Pablo, los organizadores por aquel entonces. “Cincuenta años después hemos aprendido”, aseguró Chivite.A la figura de Alfonso I se le fueron añadiendo otros referentes históricos y del mundo de la cultura como la de Carlos de Viana, infante que ostentó por primera vez este título y famoso por impulsar las artes y la cultura, al que la presidenta elogió y lo consideró como referente. “Siguiendo la senda del Príncipe de Viana, como presidenta de Navarra, quiero liderar este despertar cultural”, afirmó. También se refirió al filósofo Eugenio D´Ors y al propio Pedro Salaberri, entre otros. Llegado el momento de elogios al pintor, Chivite le remarcó como uno de los “artistas navarros contemporáneos más reconocibles” y alabó la obra de Salaberri. “Ha iluminado de color valles, montañas, pueblos y ríos y algún que otro despacho”, confesó. Por último, la presidenta señaló a la cultura como medio de mejora para las personas y “bien común” y felicitó a Salaberri. Al terminar el discurso Chivite tuvo un lapsus y se dirigió a Salaberri con el nombre de “perro” en vez de “Pedro”, aunque rápidamente corrigió.
volver arriba

Activar Notificaciones

Continuar

Gracias por elegir Diario de Navarra

Parece que en el navegador.

Con el fin de fomentar un periodismo de calidad e independiente, para poder seguir disfrutando del mejor contenido y asegurar que la página funciona correctamente.

Si quieres ver reducido el impacto de la publicidad puedes suscribirte a la edición digital con acceso a todas las ventajas exclusivas de los suscriptores.

Suscríbete ahora