Opinión
Crónicas de Asfalto
Olas
Actualizada 24/04/2016 a las 06:00
FRANCISCO J. ZUDAIRE
En realidad, no dispongo del menor atisbo de conocimiento de por qué somos así. A ver, sé que somos así, lo tengo claro, pero desconozco el porqué. Entonces, no queda otra que ser como somos. Aquella tarde de jueves estaba con el ánimo en el ático, muy alto, y el bolsillo, como sucedía habitualmente, en el sótano. ¿Por qué había tantos pisos de distancia entre uno y otro? Si hemos de ser sinceros, el que se mantenía en su puesto era el bolsillo, y era el ánimo
En realidad, no dispongo del menor atisbo de conocimiento de por qué somos así. A ver, sé que somos así, lo tengo claro, pero desconozco el porqué. Entonces, no queda otra que ser como somos. Aquella tarde de jueves estaba con el ánimo en el ático, muy alto, y el bolsillo, como sucedía habitualmente, en el sótano. ¿Por qué había tantos pisos de distancia entre uno y otro? Si hemos de ser sinceros, el que se mantenía en su puesto era el bolsillo, y era el ánimo
Etiquetas
Comentarios
Te recomendamos que antes de comentar, leas las normas de participación de Diario de Navarra