Incasa ofrece dos años de salario para cubrir 60 salidas voluntarias
Los representantes de la empresa confirman la decisión de cerrar toda actividad productiva en la fábrica de Egüés

- C.L.
“Retorcida y rocambolesca”. Así es como el presidente del comité de Incasa-Cabelte, Eduardo Etxezarreta (ELA), definía el martes la propuesta que por la mañana les trasladó la dirección para poner fin a la actividad productiva en la fábrica de Egüés, que supondrá el despido de 70 de sus 81 empleados. Las vagas esperanzas de que la traumática decisión adelantada la semana pasada podría tratarse de un farol, con el objetivo de ablandar la postura de la plantilla ante el ERE con 24 despidos negociado hasta el 5 de diciembre, se esfumaron con la confirmación de que no hay ninguna intención de mantener la fabricación de cables en Navarra.
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Según los datos facilitados por la parte social, los representantes de Cabelte anunciaron la apertura de un periodo de bajas voluntarias que se cerrará el próximo lunes. La empresa pretende que se apunten un mínimo de 60 trabajadores, para lo que ofrece una indemnización de 30 días por año trabajado con un tope de 24 mensualidades, unas dos anualidades. “El problema es que solo garantiza el cobro de 20 días de indemnización, que se abonaría antes de finalizar el año, mientras que los otros diez quedan pendientes para 2019”, explicaba Etxezarreta, que destacaba la falta de garantías para avalar esos pagos.
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Los negociadores de la compañía lusa no concretaron nada más, ni respecto a las intenciones de qué sucederá con el ERE planteado para echar a 24 empleados, presentado el 5 de noviembre, ni sobre los planes de cómo se articulará el despido de toda la plantilla de producción. “Nos dejan en una completa incertidumbre. No es serio que, tras un mes de negociaciones de un ERE con 24 despidos, ahora nos salgan con estas”, lamentaba Etxezarreta, que denunciaba las presiones de la empresa con la amenaza de declararse en concurso si el comité no se avenía a aceptar el plan de despidos, lo que abocaría a limitar las indemnizaciones al Fogasa.
Sin una nueva fecha para continuar las negociaciones, los representantes de Cabelte solo se comprometieron a notificar el próximo 19 de diciembre si se ha alcanzado el cupo de voluntarios. Ante esta situación, el comité trasladaba las intenciones a la plantilla, que en asamblea aprobaba declarar el próximo lunes un paro de jornada completa. “Seguimos con la apuesta por mantener la actividad, que es rentable, pero lo vemos cada vez más negro”, reconocía el presidente del comité.