Automoción
Seat reclama para Martorell el coche al que aspira VW Navarra
El máximo responsable de la marca española del grupo Volkswagen aseguró este miércoles que el ID.2 será uno de los modelos que se producirán en Cataluña
- C.L.
Las últimas declaraciones de Wayne Griffiths, presidente de Seat y consejero delegado de Cupra, han vuelto a provocar urticaria en Volkswagen Navarra. Según recogía este miércoles La Tribuna de Automoción, el máximo responsable de la emblemática marca española encuadrada en el grupo alemán dio por sentado que la fabricación del ID.2, el modelo al que aspira la factoría de Landaben, se adjudicará a Martorell. Hizo estas afirmaciones en el contexto de los actos para promocionar los próximos lanzamientos de la marca aspiracional Cupra, un evento a cuya jornada inicial del miércoles asistió la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite.
Griffiths aseguró que seguía trabajando para traer “más modelos eléctricos que los contemplados en el proyecto Future Fast Forward (F3)”, aquellos vinculados al PERTE del vehículos eléctrico y conectado que se espera que esté resuelto en septiembre. Según anunció en diciembre del año pasado el presidente ejecutivo del grupo Volkswagen, Herbert Diess, Martorell iba a centrarse en la producción de tres coches pequeños eléctricos convencionales de Cupra, Volkswagen y Skoda y Landaben se encargaría de la producción de los SUV eléctricos pequeños de Volkswagen y Skoda.
En septiembre del año pasado, Volkswagen presentó el prototipo ID.Life, un coche al que la prensa especializada del motor identificó como un avance del futuro ID.2, el pequeño SUV eléctrico de la marca germana. Las declaraciones realizadas ayer por Griffiths echan por tierra el reparto adelantado por Diess, aunque el presidente del comité de Volkswagen Navarra, Alfredo Morales (UGT), insistía en que la información que manejaban en la fábrica era que el ID.2 es el modelo adjudicado a Landaben. Morales señalaba también que lo dicho por Griffiths estaba relacionado con la falta de carga de trabajo en Seat. En ese sentido, entendía la necesidad de llevar a la planta catalana más modelos, aunque reclamaba que no se hiciera a costa de Navarra.
