Cambio climáticoEl informe realizado por Ayuntamiento de Pamplona en colaboración con la UPNA destaca los Ensanches como el distrito con temperaturas de media más altas registradas y a San Jorge como el barrio más frío de la ciudad
Los Ensanches: la zona más cálida de Pamplona
El informe realizado por Ayuntamiento de Pamplona en colaboración con la UPNA destaca los Ensanches como el distrito con temperaturas de media más altas registradas y a San Jorge como el barrio más frío de la ciudad

- Markel Trecet
En los días más calurosos de verano, algunas calles de Pamplona actúan como un acumulador de calor. Horas después de que se vaya el sol, la temperatura llega a estar 7 y 8 grados por encima de la estación meteorológica de la UPNA, situada en un descampado a 433 metros de altitud. Así ocurre en la calle Amaya, la avenida Pío XII, en la plaza Felisa Munárriz o la Rochapea.
Cinco estaciones fijas y siete móviles han recogido durante 13 meses datos sobre las temperaturas en Pamplona para la Estrategia Go Green del Ayuntamiento en la lucha contra el cambio climático. Las mediciones registraron el año pasado midieron 30 noches tropicales, con temperaturas mínimas de 20 grados y 3 noches tórridas con más de 25 grados.
El estudio ha tomado como temperaturas de referencia la estación meteorológica de la Universidad Pública de Navarra (UPNA), situada lejos del entorno urbano. En general, las estaciones urbanas registraban temperaturas promedio de 4 grados superiores. No obstante, en determinadas condiciones la estación de la UPNA llegó a marcar 2 grados por encima de las estaciones urbanas.
El estudio concluye que San Jorge es el barrio más fresco mientras que el Primer y Segundo Ensanche son los más calurosos. Las zonas con menos momentos de salto térmico positivo, es decir con diferencias entre la temperatura diurna y la nocturna son el Casco Viejo, la Rochapea y Buztintxuri, por un lado, y Mendillorri, Beloso y Lezkairu por otro. San Juan e Iturrama se sitúan en una posición intermedia.
En este sentido, el resultado del informe ha recomendado un estudio más profundo del efecto de “isla de calor”, la acumulación de calor durante horarios nocturnos debido a la capacidad de las áreas urbanas de retener el calor debido a la edificación, añadiendo otras variables como la humedad, el viento y la radiación solar.
Este estudio público comenzó en noviembre de 2012 y ha recogido datos a través de los barrios de Pamplona. Las temperaturas máximas se han concentrado en el norte de la capital y en los dos Ensanches, en comparación al barrio de la Milagrosa, que registró en la estación fija de la Plaza Felisa Munárriz mayores problemas de temperatura nocturna. El resto de los puntos fijos de medición se situaron en la calle Amaya, Pío XII, Rochapea, el boulevar de Iturrama y en el campus universitario, siendo este último el de referencia.
En general, se observa como las mayores diferencias campo-ciudad se dan en las horas previas al amanecer y en las horas posteriores al anochecer.
El proyecto, que parte de una colaboración entre la corporación municipal y la Universidad Pública, nace con el objetivo de constituirse como “fuente de información de partida” de cara a futuros análisis medioambientales en Pamplona. Para las labores de medición, el grupo de investigación ha necesitado de la ayuda de la Mancomunidad para realizar los registros de temperatura, ya que las siete estaciones móviles configuradas sobre los vehículos de pre-recogida de residuos sólidos han sido clave para completar el informe.