El Banco de Semillas de Svalbard es “una especie de Arca de Noé vegetal”, ideada para salvaguardar la alimentación del futuro en caso de un cataclismo. Se trata de una infraestructura científica mundial, enclavada en una isla del archipiélago ártico de Noruega. Hace dos meses, volvió a ser actualidad por el envío de 1.080 variedades españolas a su depósito inmenso, llamado a ser el almacén de materia prima con la que alimentar al mundo en unas circunstancias extremas que supongan una amenaza. El miedo a conflicto internacional, instalado desde que Rusia invadiese Ucrania hace tres meses, no ha hecho sino reforzar los mecanismos de prevención, lógicamente también desde el punto de vista de abastecimiento.
Por de pronto, el Banco de Semillas “guarda más de un millón de muestras de semillas de diferentes cultivos de casi todos los países del mundo; la mayor colección de biodiversidad agrícola. Este material, también conocido como recursos fitogenéticos, constituye la base de casi todos nuesta alimentación, aprecia Luis Guasch, investigador del INIA-CSIC y director del Centro de Recursos Fitogenéticos del instituto. Tal y como señaló en marzo, “las primeras 1.080 variedades españolas ya están preparadas en congeladores del INIA-CSIC. De ellas: 300 son cereales de invierno, 114 de las cuales corresponden a trigos; 510 son leguminosas, de las que 189 son judías; 200 son hortícolas, 81 de ellas tomates, y 108 variedades de maíces”.
EL APORTE DE NAVARRA
Hasta aquí la explicación científica a escala mundial y nacional. Claro está, gozando como goza de una diversidad de cultivos con ajuste a su extensión y riqueza de climas, la Comunidad foral está presente en el Arca de Noé vegetal de Noruega. Son
doce las semillas enviadas desde Navarra, de ahora y antaño:
Puerro de Arre, de
Villava;
Acelga verde, de
Mendigorría;
Nabo, de
Elgorriaga;
Pimiento del piquillo, de
Lodosa;
Melón, de
Aibar;
Cardo blanco sin pinchos, de
Pamplona;
Tolosana, de
Atez;
Pampanoa, de
Etxarri (valle de Larraun);
Caparrón pinto, de
Mendavia; y las variedades de
trigo Escaña, Blanco de
Corella y Cabezón de
Estella.
Ejemplo de la pluralidad y del celo en la conservación del campo, a diferencia de otras latitudes de menor extensión y menor peso del sector primario, Navarra duplica al País Vasco en el aporte al Banco de Semillas.
Para conocer las razones de selección basta con atender las explicaciones dadas por Lucía de la Rosa, investigadora del Centro de Recursos Fitogenéticos del INIA-CSIC y coordinadora de los bancos de germoplasma de la Red del Programa Nacional de Recursos Fitogenéticos para la Agricultura y la Alimentación de España: “No hemos buscado la representatividad territorial, pero trabajamos en una red de bancos con materiales de todo el país y también de fuera. En el caso de las muestras de Navarra, los trigos se han seleccionado porque forman parte de una colección que llamamos nuclear o core collection, formada por materiales que representan las distintas condiciones ecogeográficas del país”.
“Una de las condiciones de los materiales seleccionados -añade la especialista en su razonamiento- ha sido que tengan semilla cosechada en los últimos años. El resto de los cultivos de Navarra se han incluido porque se han regenerado o multiplicado en los últimos años como parte de las actividades que desarrollamos actualmente en los bancos de germoplasma”. Hay variedades navarras, como, por ejemplo, el trigo Cabezón de Estella o la alubia Pampanoa, también llamada como Banaarra en el valle de Larraun y en Areso, entre otros puntos, que remiten a épocas pretéritas de cultivo.
Las muestras navarras, como las del resto de España, pasaron unos protocolos de “trabajo minucioso”, como asegura el CSIC. Lo que sus técnicos denominan “plan de depósito” de las semillas de la colección base se inició hace más de seis años. Según dicen, “para que las muestras sean recientes y se conserven viables durante el mayor tiempo posible, quizá cientos de años, se requiere su multiplicación en el campo en las condiciones adecuadas, sin cruces ni mezclas con otras variedades, manteniendo la identidad de las variedades”.
El proyecto internacional está auspiciado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la organización internacional Global Crop Diversity Trust (CROP Trust), la Fundación Bill y Melinda Gates y el gobierno de Noruega, “que ha hecho de la instalación un compromiso con la conservación de los recursos fitogenéticos con vistas a poder hacer frente en caso de necesidad a los desafíos planteados por el cambio climático y otras posibles amenazas globales”.
LAS SEMILLAS NAVARRAS ENVIADAS A NORUEGA
ACELGA VERDE
Procedencia: Medigorría
Género: Beta
Especie: Vulgaris
NABO
Procedencia: Elgorriaga
Género: Brassica
Especie: Rapa
PIMIENTO DEL PIQUILLO
Procedencia: Lodosa
Género: Capsicum
Especie: Annum
MELÓN
Lugar: Aibar
Género: Cucumis
Especie: Melo
CARDO BLANCO SIN PINCHO
Procedencia:Pamplona
Género: Cynara
Especie: Cardunculus
TOLOSANA
Procedencia: Atez
Género: Phaseolus
Especie: Vulgaris
PAMPANOA
Procedencia: Etxarri (valle de Larraun)
Género: Phaseolus
Especie: Vulgaris
CAPARRÓN PINTO
Procedencia: Mendavia
Género: Phaseoulus
Especie: Vulgaris
ESCAÑA
Género: Triticum
Especie: Turgidum
BLANCO DE CORELLA
Género: Triticum
Especie: Turgidum
CABEZÓN DE ESTELLA
Género: Triticum
Especie: Turgidum