Literatura
Las aventuras libreras que merecen premio
La autora Bibiana Candia, la traductora Danele Sarriugarte y el editor César Sánchez recogieron este viernes los galardones por ‘Azucre’, ‘Walden’ y ‘Atlas de los grandes viajeros y exploradores’, respectivamente

Publicado el 26/03/2022 a las 06:00
Aventura. Ha resultado que las tres obras premiadas por las librerías navarras de la Asociación Diego de Haro como las mejores en castellano, euskera e ilustrada de 2021 tienen esa palabra como nexo de unión: o porque las historias que cuentan lo son o porque lo ha sido sacarlas adelante. Se descubrió este viernes, en la entrega de los galardones a la escritora Bibiana Candia, autora de 'Azucre' (Pepitas de calabaza); la traductora Danele Sarriugarte del clásico 'Walden' (Katakrak), y el editor César Sánchez de 'Atlas de los grandes viajeros y exploradores' (Fulgencio Pimentel e Hijos) que firman Isabel Minhós y Bernardo Carvalho.
Los nombres de los premiados en las cuatro ediciones anteriores -Eduardo Halfon, Santiago Lorenzo, Jon Bilbao, Jesús Marchamalo, Julia Sardà…- está permitiendo al premio “coger esa estela, ese caché” que querían las librerías. Porque su criterio siempre ha sido ofrecer las recomendaciones de esos libros por los que editoriales, autores y autoras luchan por dar visibilidad.

Bibiana Candia reveló que en el verano de 2017, al descubrir la historia de los 1.700 rapaces gallegos convertidos en esclavos en Cuba para trabajar en el azúcar hace siglo y medio, estuvo “absolutamente convencida” de que, si conseguía contarla “de una forma honesta” y que alguien la publicase, “la gente iba a querer leerla, porque era una historia tan potente, tan interesante y en el fondo tan moderna que tocaba la semilla de lo que somos, de la humanidad”. “Me da muchísima satisfacción”, continuó, “que las librerías y los lectores la hayan traído hasta aquí: refuerza más la idea de que muchas veces dedicarse a la literatura es en realidad una cuestión de fe”, se refirió a 'Azucre', un triste capítulo de la historia, definieron las librerías, que vio la luz con las cartas que lograron cruzar el océano de vuelta y hoy conservadas en el Archivo del Congreso de los Diputados. La autora sumerge en el tema “siempre actual de la inmigración”, de la incertidumbre, “del despedirse de los seres queridos sin saber si habrá vuelta atrás, de cuando la vida te lleva en volandas sin dejar otra elección y siempre con la ilusión de encontrar algo mejor”.
LIBROS CON OTRO TEMPO
“Explicar el arte es complejo, mucho mejor observarlo”. La invitación de las librerías se descubrió con el premio a 'Atlas de los grandes viajeros y exploradores', el proyecto de la editorial riojana Fulgencio Pimentel e Hijos que “rompe con un concepto clásico tanto en el contenido como en la forma”. Y es que, añadieron, en este mundo globalizado donde desde el salón de casa se puede conocer hasta el último rincón del hemisferio, este libro homenajea a quienes se lanzaron a atravesar las fronteras de su mundo para abrirse con curiosidad a culturas desconocidas.
Y para el editor, César Sánchez, esta es la clase de libros a veces más satisfactorios “cuando uno ve un amplio espectro de gente con el mismo brillo de sorpresa, de magia” al enfrentarse a “vidas reales y aventureras como las de Atlas...”, que incluye al gaditano Carlos Cuarteroni, “un gran desconocido del que prácticamente no hay bibliografía” (libertador de esclavos en los mares de China, inspiró el Sandokan de Salgari). Definió a la autora de los textos, Isabel Minhós, como “la valiente que se enfrenta a un libro de estas características, más ahora con el miedo que hay a meterse en zambras que suenen a colonialismo”, y a Bernardo Carvalho como “un artista todoterreno”.
“Publicar un clásico como este ha tenido que ser una aventura”, fue la forma de felicitar de Sánchez a Danele Sarriugarte por su premiada traducción al euskera de 'Walden'. Y lo ha sido, dijo ella, pero también “un proyecto bonito, un trabajo intenso” del que recuerda haber estado “muy metida dentro del libro”. Recordó la corrección de Koro Navarro -“ha ayudado a que el libro fluya”- y el prólogo del experto en Walden Antonio Casado da Rocha que ha ella dio garantía y permitió no sentirse tan cohibida con el proyecto del libro, “que tiene su complejidad”. Reflexionó sobre público al que podrá costar entrar en una obra de hace 200 años. “Por eso se agradece que se premie un libro que tiene otro tempo, una sensación que nos falta en esta vida de ahora”, subrayó.