Radicalismo y agresiones en la calle Curia
Los radicales de la izquierda abertzale volvieron a organizarse para protagonizar un execrable episodio violento, que dejó un policía municipal con la nariz rota por un puñetazo, al paso de la procesión de San Fermín y la Corporación municipal por la calle Curia de Pamplona. Insultos y agresiones que tuvieron especial foco en los concejales de Navarra Suma, el PSN y representantes de la Iglesia, lo que da cuenta de la calaña ideológica que está detrás de esa minoría radical que los promueve. Esta es la manera que tienen los de siempre de entender la discrepancia política, emprenderla contra quienes piensan diferente, en unas escenas más propias de un linchamiento, sin importarles siquiera la presencia de niños ni las consecuencias que la tensión provocada puede generar entre la multitud congregada. Escenas que parecen de otra época en una donde no hay cabida para la violencia, por más que haya quienes todavía no la puedan superar. A la enérgica condena por lo sucedido, sólo cabe añadir que se pueda dar con los responsables para que paguen las consecuencias legales de estas agresiones.
ETIQUETAS