"Adanero y Sayas, sin apoyos"
EL Consejo Político de UPN, el máximo órgano decisorio del partido entre congresos, del que forman parte los dos diputados que el pasado jueves protagonizaron un acto de rebeldía en el Congreso, les retiró su confianza por contravenir las directrices de la dirección regionalista. Una mayoría notable, representada por el 80% de los miembros del Consejo, les pidió que entregasen sus actas de diputados, y si no lo hacen, se iniciará el procedimiento para su expulsión. El comité de Disciplina del partido ya ha abierto expediente contra los diputados Sergio Sayas y Carlos García Adanero, que votaron en contra de la reforma laboral. Los órganos de dirección regionalistas destacan la “gravedad” de la actitud de los diputados, la falta de disciplina, la ocultación del voto y el daño al propio partido y a sus dirigentes. Adanero y Sayas acudieron al Consejo Político, un órgano compuesto por más de 230 miembros, todos los cargos públicos, parlamentarios, representantes de las asambleas locales del partido, cabezas de listas municipales, etc., quizás en busca del apoyo que no les había dado el Comité Ejecutivo, presidido por Javier Esparza. Sin embargo, comprobaron la distancia y decepción con la que desde UPN se había visto la actuación de ambos diputados en el Congreso. Nadie en el Consejo les defendió. Comprobaron que las decisiones individuales, al margen de las directrices del partido, tienen consecuencias. A partir de ahora, el comité de Disciplina analizará el caso para determinar la gravedad de la conducta de los diputados y las posibles sanciones. No obstante, García Adanero y Sayas ya han anunciado su intención de mantenerse en el escaño hasta el final de la legislatura, lo que significa que si finalmente son expulsados, UPN se quedará por primera vez desde su fundación, en 1979, sin representación en el Congreso de los Diputados, propiciando todavía un daño mayor al que ya han ocasionado con su conducta.