La nueva
Estrategia de Desarrollo Local Participativo de la Ribera, que marca los objetivos y líneas de acción para la
mejora y progreso de la comarca entre los años 2023 y 2027, teniendo entre sus principales metas la mejora de la competividad de las empresas y creación de empleo, apuesta por la sostenibilidad y la innovación, mayor cohesión económica y social o el avance en la transformación digital,
contará para su ejecución con 5.178.953,10 euros, financiados por la Unión Europea (fondos FEADER) y el
Gobierno de Navarra. Del total de esta cuantía, al menos 3.262.740,45 euros se destinarán a
cinco convocatorias de ayudas públicas para acometer proyectos alineados con la citada estrategia que presenten tanto entidades locales como empresas. La primera de esas convocatorias se realizará a finales de este año.
Además, otros 326.526,72 euros serán para dos proyectos propios a desarrollar a partir de 2024 por parte del Consorcio EDER, formado por 37 entidades, incluidos los 27 Ayuntamientos de la Ribera, y que es el encargado de elaborar y ejecutar la citada estrategia. Por otra parte, otros 258.947,65 euros serán para llevar a cabo, también a partir del próximo año, otros tres proyectos de cooperación de EDER con otros grupos de acción local -uno a nivel local, otro a nivel nacional, y un tercero a nivel europeo-.
Para realizar esta estrategia, tras un diagnóstico de la situación actual, se llevado a cabo un proceso participativo en 11 mesas de trabajo celebradas en 6 localidades con 112 asistentes -representantes de la administración pública, empresas, colectivos y asociaciones y vecinos a título particular-, en las que hubo más de 300 aportaciones ciudadanas.
Plantea 5 objetivos generales, como son promover la competitividad y la innovación del tejido económico y empresarial, así como la generación y mantenimiento del empleo; conservar y recuperar el patrimonio arquitectónico y cultural y promover su uso eficiente y sostenible; promover la conservación y puesta en valor del medio natural, la acción por el clima y la transición ecológica; mejorar la calidad de vida y la cohesión socio-territorial; y potenciar la transición digital en la Ribera.
Cada uno de estos objetivos cuenta con dos líneas estratégicas. Los proyectos que se presenten a las ayudas deberán estar relacionados con las citadas líneas.
UNA "HOJA DE RUTA"
EDER presentó este viernes esta nueva estrategia en la sede de la Mancomunidad de la Ribera de Tudela ante más de 70 representantes del ámbito institucional, empresarial y social de la Ribera. El acto corrió a cargo de la consejera de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, Itziar Gómez; y el alcalde de Tudela, Alejandro Toquero, y Sergio Villava, presidente y gerente de EDER, respectivamente.
Toquero la definió como “la hoja de ruta para proyectos y convocatorias de ayudas a entidades locales, pymes y asociaciones gestionadas por EDER y financiadas por los fondos FEADER y el Gobierno de Navarra”. Destacó el proceso participativo realizado, que calificó de “plural, inclusivo y enriquecedor”. “Esta participación desembocará en mejoras que nos van a beneficiar a todos. Podremos ser más eficaces, que es de lo que se trata”, apuntó.
Itziar Gómez consideró que la estrategia de la Ribera, “hoja de ruta de las principales líneas de actuación e inversión para el próximo cuatrienio, será una gran herramienta” para apuntalar su crecimiento y desplegar sus fortalezas con las medidas previstas.
Tras afirmar que ha sido diseñada con una ayuda de cerca de 200.000 euros del departamento que dirige, incidió en que “contará con una dotación de más de 5 millones de euros para su ejecución del 2023 al 2027”. “El apoyo del Gobierno en el avance de las zonas rurales es fundamental, y por eso son importantes las convocatorias de ayudas dirigidas a los grupos de acción local para el diseño de esta hoja de ruta”, dijo.
Sergio Villava señaló que este plan de acción busca “dinamizar el tejido empresarial y a las entidades locales de la Ribera, con un enfoque muy claro de desarrollo de proyectos; es decir, que el desarrollo, la riqueza, las actividades, se hagan y se queden en el territorio”. “Esta estrategia tiene que trabajar no solo la parte pública, sino también la privada, y tratar de buscar oportunidades para los jóvenes, que es una de las claves”, dijo, al tiempo que añadió otras como la sostenibilidad y economía circular o la transición digital.
Tras las intervenciones hubo una mesa redonda sobre los retos de implementar la estrategia.
OBJETIVOS Y ESTRATEGIAS
Cinco objetivos. Los cinco objetivos de la nueva Estrategia de Desarrollo Local Participativo de la Ribera son promover la competitividad y la innovación del tejido económico y empresarial, así como la generación y el mantenimiento del empleo; conservar y recuperar el patrimonio arquitectónico y cultural y promover su uso eficiente y sostenible; promover la conservación y puesta en valor del medio natural, la acción por el clima y la transición ecológica; mejorar la calidad de vida y la cohesión socio-territorial; y potenciar la transición digital en la Ribera.
Líneas estratégicas. Cada objetivo cuenta con dos líneas estratégicas, de modo que los proyectos que se presenten a la convocatoria de ayudas tendrán que estar relacionados con las mismas. Son las siguientes: (Objetivo 1), infraestructuras, servicios estratégicos y de apoyo para la competitividad empresarial y del emprendimiento; y creación y mantenimiento de empleo impulsando el valor añadido, innovación o sostenibilidad en las empresas. (Objetivo 2), conservación, recuperación y puesta en valor del patrimonio arquitectónico; y del patrimonio cultural. (Objetivo 3), apoyo e impulso a la economía circular y a la transición ecológica; y conservación y puesta en valor del patrimonio natural y gestión ante riesgos climáticos. (Objetivo 4), territorio conectado, movilidad sostenible y accesibilidad universal; y recursos y proyectos para hacer frente al reto demográfico, mejorar la cohesión social y la calidad de vida de todas las personas. (Objetivo 5), Impulso a la transición y accesibilidad digital de los servicios públicos; e impulso a la transición digital de pymes y otras entidades.