Diario de Navarra ha realizado durante toda esta semana el balance de la legislatura en Educación por medio de artículos, opiniones de expertos, infografías, foros de debate y opinión. A continuación se plasman las principales propuestas que el periódico hace suyas respecto a los retos que se deberían abordar para garantizar una educación de calidad.
El sistema navarro sigue siendo uno de los más potentes, con un equilibrio estable entre redes pública y concertada, y una reducción del fracaso escolar y la tasa de abandono, que en estos momentos es del 5,7%, por debajo de la media europea. Entre los principales retos que afronta la Educación, reclamado por todos los agentes, se encuentra la necesidad de que los grupos políticos alcancen un gran pacto educativo, y que garantice la libertad de elección de centro a las familias. Que las leyes cambien con frecuencia supone una afección para la calidad educativa y un serio contratiempo para centros y docentes. Por eso, el pacto social para la mejora de la educación consensuado por el Consejo Escolar puede ser un buen punto de partida.
Preservar el derecho de las familias a elegir el tipo de educación que quieren para sus hijos e hijas. Un pilar esencial sobre el que se asienta la libertad educativa. Y a ello deben dirigir sus esfuerzos las autoridades políticas, evitando actuaciones y legislaciones que ponen el foco sobre modelos educativos por cuestiones ideológicas. Lo que de facto supone que se cercenen las posibilidades de muchas familias a elegir libremente la enseñanza deseada.
Entre los efectos colaterales de la pandemia está el empuje súbito que ha sufrido el proceso de digitalización en las aulas que había comenzado años atrás. La política de un alumno un ordenador ha revolucionado la manera de estudiar, de hacer las tareas y de relacionarse en el aula, especialmente en la red pública, donde esta tecnología no era masiva. Pero como reconocen los expertos, la tecnología es una herramienta más que debe ayudar al desarrollo de los alumnos sin olvidar otras capacidades, como lectura y escritura. La tecnología ayuda a personalizar la educación según las necesidades, pero no puede sustituir la imprescindible interacción entre alumnos, y alumnos y profesores. La digitalización va, además, de la mano de una excesiva inmediatez, y obliga a centros y docentes a establecer unos límites en la relación entre los profesores y las familias. El objetivo debe pasar por un correcto equilibrio entre el sistema presencial y digital.
El desarrollo tecnológico y digital en los centros educativos también supone un reto para los docentes. Dado que la tecnología ha llegado para quedarse, es necesario dotar a los docentes del material necesario y de una formación continúa acorde a las exigencias que se reclaman de ellos. Máxime cuando se empieza a hablar de niveles competenciales en tecnología similares a los idiomas.
En el año 2020 nacieron 5.036 niños en Navarra. Son 2.000 menos que en 2008. La bajada de la natalidad tiene su reflejo e incidencia en el ámbito educativo. Una realidad que se presenta en forma de preocupación, por la posibilidad de que se cierren aulas, pero también de oportunidad. Oportunidad que puede pasar por bajar los ratios por aula, y de esta manera ofrecer un mejor servicio educativo. El reto está en encontrar el equilibrio entre una mejor atención al alumnado y la sostenibilidad del sistema.
El
Gobierno de Navarra ultima la
nueva Orden Foral que regirá los horarios escolares. En 2024, todas las familias de Navarra con hijos en edad escolar deberán votar qué jornada escolar quieren en su centro: continua o partida. Una votación que en los centros que ya se ha planteado ha supuesto un tensionamiento de la Comunidad Escolar. Uno de los elementos de fricción está en el modelo de votación y las mayorías necesarias. Criterios que el Gobierno debe estudiar en un asunto con tantas casuísticas como familias. Además de la
conciliación laboral y la libre elección de las familias, es imperioso valorar el impacto que los distintos modelos tienen sobre la educación de los alumnos. Un factor esencial, unido a la continuidad del modelo que elija cada centro para valorar objetivamente su resultado.
Uno de los problemas endémicos que arrastra la Educación es el elevado grado de interinidad de sus docentes (49%). Una situación que pese a las 2.000 plazas de docentes convocadas por el Gobierno de Navarra no se consigue revertir. Se siguen incumpliendo unos pactos educativos en los que el compromiso del Gobierno es reducir la interinidad al 8%. Algo que hoy por hoy se antoja muy complejo, pero que es un reto sobre el que es obligado trabajar.
8. Nuevo sistema de admisión
La modificación de la elección de centro esta legislatura ha supuesto la redistribución del alumnado con necesidades específicas en virtud de un índice que se asigna a cada centro. Los profesionales alertan de que el reparto de alumnos puede dar lugar a guetos que no son un reflejo de la sociedad, y que varía en función de las distintas realidades que se viven en diversas zonas de Navarra. La redistribución de los estudiantes debe preservar la libertad de elección de las familias, y debe ir acompañada de las ayudas necesarias para proporcionar la atención especializada que precisan muchos de estos alumnos.