Edición impresa

Actualidad Navarra, Pamplona, Tudela, Estella, Osasuna, Deportes, Gobierno de Navarra, Ayuntamiento de Pamplona, Política, Economía, Trabajo, Sociedad.

Sucesos

Un rescate a diez grados bajo cero en el Moncayo

El teniente Baín Gutiérrez, responsable de Montaña de Jaca y Navarra de la Guardia Civil, relata el reto de localizar y ayudar a los rescatados

Ampliar Guardia Civil
Un agente de la Guardia Civil asegura a uno de los jóvenes durante el rescateGUARDIA CIVIL
Publicado el 24/02/2023 a las 06:00
En la primera alerta al servicio de emergencias, registrada a las 16 horas del miércoles, el alertante manifestaba que se había echado una niebla tan densa que no veía a sus otros dos amigos. En teoría, los tres descendían del Moncayo. No por la vertiente habitual, camino del monasterio, sino por un paraje denominado El cucharón, A uno de ellos, al menos, lo escuchaba, a voces. Al otro no, por lo que sospechaba que podía haberse caído. El firme, de nieve helada, había convertido la bajada en una pista de máximo riesgo. El teniente Baín Gutiérrez, de la Guardia Civil, relata que hicieron bien en avisar tan pronto como perdieron contacto visual, y advierte de que en invierno es muy importante no retrasar esa primera petición de ayuda. Las horas de luz, sobre todo entre noviembre y marzo, con horario de invierno, son de importancia vital. En respuesta al aviso, Gutiérrez movilizó a su equipo. La noche se echaba encima, comenzaba a nevar y en “la canal”, como describe ese tramo, el viento soplaba a una velocidad sostenida de 25km/h, provocando una sensación térmica de entre -7 y -10 grados bajo cero. “Efectivamente, uno de los tres chavales, el que no respondía a sus compañeros, se había caído y estaba magullado”. Llegar hasta ellos llevó varias horas al equipo del Greim de Tarazona y Huesca desplazado, y se ayudaron de cuerdas para ir ascendiendo. “Los otros dos chicos estaban ilesos, aunque con un principio de hipotermia. Las condiciones eran puramente invernales y ellos no llevaban ropa de abrigo o piolets. Vestían zapatillas de deporte”. La situación en ese punto no era halagüeña, por lo que decidieron subir con los chicos a la cima y bajar por la vertiente habitual. El rescate concluyó cerca de la medianoche.
CONDICIÓN INVERNAL
El dispositivo ayudó además a la otra parte del grupo de Murchante, otros 7 jóvenes que no llegaron hasta el área de El Cucharón, pero a los que la niebla también atrapó y, ante la posibilidad de terminar despeñado en un barranco, fueron reconducidos hasta el lugar donde habían dejado los vehículos. “La niebla juega muy malas pasadas incluso conociendo la zona. Literalmente, dejas de ver los cortados y, a veces, en estos casos, lo mejor es pedir ayuda y esperar antes que exponerse a una caída que puede ser hasta mortal”.
Quizá por su ubicación geográfica, muchas personas no creen que subir al Moncayo implique una preparación o una equipación propia de cumbres pirenaicas, pero Baín Gutiérrez asegura que no hay que confiarse. “Sobre todo en invierno y con condiciones de nieve o hielo, la exigencia del Moncayo no difiere mucho de la de una cima importante de alta montaña”. Como en todas las salidas de este tipo, Gutiérrez insiste en no olvidar ciertos consejos básicos: no ir solo, no sobre estimar las posibilidades (la cima siempre va a estar ahí y a veces lo más sensato es darse la vuelta), informarse, planificar la ruta y saber que la actividad no acaba en la cima. “Hay que volver. Al coche y a casa”.
volver arriba

Activar Notificaciones

Continuar

Gracias por elegir Diario de Navarra

Parece que en el navegador.

Con el fin de fomentar un periodismo de calidad e independiente, para poder seguir disfrutando del mejor contenido y asegurar que la página funciona correctamente.

Si quieres ver reducido el impacto de la publicidad puedes suscribirte a la edición digital con acceso a todas las ventajas exclusivas de los suscriptores.

Suscríbete ahora