Poca memoria y mucha revancha

Yo no sé qué estará pensando este gobierno con su presidente a la cabeza ni cuál será su última balandronada, pero ya está bien de mover tumbas, levantar losas, cambiar nombres y alterar calles y plazas. Ahora con esto de la memoria histórica nada me extrañaría que cualquier día intentara quitar o cambiar el nombre de la misma España. La penúltima ha sido anular el nombre del fundador de la legión y radio nacional de España, José Millán Astray… Que no es que le deje cojo y mutilado al fundador sino al resto del cuerpo que tantas vidas dejó en los campos de batalla. Pero aquí todo vale y como persona que no tiene palabra y por seguir en el mando está dispuesto a meterse en mil enjuagues, seguirá mintiendo y cediendo ante cualquier chantaje. En cuanto a lo acontecido en Navarra tampoco se ha andado por las ramas. Ahora le ha tocado a la medalla de oro al trabajo de Félix Huarte Goñi, una de las personas que más hizo por el progreso en Navarra. Empresario y promotor de grandes empresas, entre ellas la fábrica Imenasa que dieron riqueza y trabajo a Navarra y media España. Y digo yo, ¿hasta dónde puede llegar la mala conciencia, odios de políticas y revancha para tratar de deshonrar y falsear lo que fue la vida de una de las personas más queridas y más hizo por su querida Navarra? ¿Pero qué mal o deshonra pudo haber cometido una persona de familia media que desde ya muy joven se dedicó al trabajo, creando más adelante su propia empresa y con ella puestos de trabajo? Ampliándola después a nivel nacional con otros grupos de empresas y empresarios y con el solo fin de criar riqueza para el país y crear puestos de trabajo. Por no decir lo de cuántos navarros y no navarros venidos de otras tierras buscando empleo les ofreció al amparo de este hombre, asegurándoles un porvenir, futuro y trabajo que en otros lugares no habrían encontrado. ¡Menos mal que las piedras son mudas porque si las piedras hablaran cuántas cosas dirían en esta España callada!