Cuando las palabras curan
- José María Isla Jiménez
El pasado 30 de abril acudí al Centro de Salud de Corella, lo hice un poco a la desesperada y reconozco que también un poco avergonzado; durante las dos últimas semanas había estado en urgencias del Hospital Reina Sofía y en las del Hospital de Navarra, y aunque el trato había sido excelente, en ninguna de las dos exploraciones habían visto nada anormal. Como ya he dicho antes, acudí al Centro de Salud de Corella sin muchas esperanzas; entré a la consulta de la doctora Olena y desde el primer momento sentí que bajaba de ese pedestal imaginario que a veces tienen ciertos profesionales para ponerse a mi altura. Son muchas las ocasiones en las que el paciente va al médico, pero no necesita medicamentos, acuden al Centro de Salud con dolencias de todo tipo, pero lo que realmente están buscando es asertividad de alguien que les escuche, empatía del profesional que sepa ponerse en su lugar del paciente y el trato humano para ser reconfortado en momentos difíciles… Todo ello lo encontré el sábado en esa consulta pero, sobre todo, lo que verdaderamente encontré fue una excelente médica. Los conocimientos suman, la experiencia suma, pero por encima de todo, la forma de ser multiplica. Muchas gracias, doctora.
José María Isla Jiménez