Con la Semana Santa a la vuelta de la esquina, qué mejor plan que planificar, valga la redundancia, excursiones individuales o con familia y amigos. La extensa oferta de iglesias, ermitas y monasterios en Navarra constituye un atractivo del que disfrutar durante los días festivos. Esta lista recoge algunos de estos templos y, aunque no han sido añadidos, no se olvida de enclaves conocidos como la ermita de Nuestra Señora de Eunate, la colegiata de Roncesvalles o la iglesia-fortaleza de Santa María de Ujué.
Próximo a la frontera que delimita los territorios de la Comunidad foral y La Rioja se encuentra el Monasterio cisterciense de
Fitero. El templo abrirá sus puertas de jueves santo a lunes de pascua, y ofrecerá visitas libres, guiadas y teatralizadas en horarios que se pueden consultar en la página web www.turismofitero.com. Desde este punto de partida también se puede iniciar una travesía de algo más de cuatro kilómetros con destino al Balneario de Fitero, lugar idóneo si se busca relajación.
2. Ruinas de la iglesia de San Pedro Viana
Apenas habían pasado unos años de la fundación de
Viana, en el siglo XIII, cuando comenzó a construirse su primer templo: la iglesia de San Pedro. Parte de la edificación se vino abajo en el siglo XVIII a causa de las sucesivas ampliaciones, pero lo que aún permanece en pie es digno de visita. La excursión se puede complementar con un recorrido por la localidad.
3. Basílica de San Gregorio Ostiense. Sorlada
A poco más de veinte minutos a pie desde
Sorlada se alza sobre una colina la basílica de San Gregorio Ostiense. Este prominente templo fue construido en el siglo XIII, aunque ha sufrido diversas remodelaciones posteriormente. En la subida a la basílica se puede visitar, además, una formación rocosa conocida como los ciclópeos monolitos de San Gregorio.
4. Iglesia de San Pedro de la Rúa. Estella
Frente al Palacio de los Reyes de Navarra se localiza la iglesia más antigua de
Estella, bautizada con el nombre de Santa María de la Rúa. Ubicada sobre un cerro, se construyó en un estilo románico tardío, aunque las futuras remodelaciones le proporcionaron elementos de estilo gótico, renacentista y barroco. En la parte trasera del templo hay un aparcamiento, y desde la iglesia se puede emprender una ruta para conocer otros enclaves de la localidad estellesa, como el Museo del Carlismo y la Basílica de Nuestra Señora del Puy.
5. Iglesia-Fortaleza de San Saturnino. Artajona
En lo más alto del Cerco de Artajona se sitúa la iglesia-fortaleza de San Saturnino. La zona más singular del templo es su tejado, que está protegido por los muros laterales y cuyas lajas de piedra permiten recoger el agua de lluvia en un aljibe con capacidad de almacenaje de 83.000 litros. Se puede acceder tanto a pie, en ascenso desde
Artajona, como en coche, que se puede estacionar en los aparcamientos situados junto a la entrada del enclave.
6. Ermita de San Pedro de Echano. Olóriz
En lo que hoy en día son las orillas del embalse de Mairaga se levantó en el siglo XII la ermita de San Pedro de Echano, de estilo románico. Una posibilidad de excursión consiste en aparcar el vehículo en la localidad de
Olóriz, caminar media hora hasta la ermita y continuar la ruta otros treinta minutos hasta el embalse, justo a los pies de los montes de Valdorba.
7. Ermita de Santiago de Itxasperri. Eguiarreta
A apenas tres kilómetros de Irurzun, solitaria en la carretera que conduce a Eguiarreta se localiza la ermita de Santiago de Itxasperri, la parroquial del desaparecido pueblo de mismo nombre. Fue levantada en el siglo XIII en estilo románico, y en 1993 recibió la calificación de Bien de Interés Cultural.
8. Iglesia de San Juan Bautista. Arizcun
Entre los siglos XVI y XVIII se construyó la iglesia barroca de San Juan Bautista de
Arizcun, siendo la nave, la torre y parte del coro y los arcos las últimas secciones en construirse. A escasos cuarenta metros del templo se ubica el monasterio de Nuestra Señora de los Ángeles. Además, la zona ofrece otras localidades de las que disfrutar, como Elizondo u Oronoz-Mugaire, pueblo que acoge el Señorío de Bertiz.
9. Ermita de Nuestra Señora de Muskilda. Ochagavía
Si hace buen tiempo y para los más atrevidos, una visita a la ermita de Nuestra Señora de Muskilda puede resultar agradable. Desde
Ochagavía se puede iniciar una ruta de algo menos de cinco kilómetros con un desnivel positivo de cerca de trescientos metros, que también es posible realizar en coche. En lo alto espera un conjunto amurallado compuesto por una ermita de aire rústico con una portada de manifiesto estilo románico y las casas del ermitaño y del capellán.
10. Santuario de Nuestra Señora de Idoya. Isaba
Desde
Isaba se puede iniciar una ruta con destino al santuario de Nuestra Señora de Idoya. Es imprescindible realizar la travesía a pie, dado que los dos únicos acceso al templo -uno desde el norte y otro desde el sur de la localidad- consisten en senderos no muy pronunciados, accesibles para niños y personas mayores. En días calurosos resulta un paseo agradable, gracias a los árboles que ensombrecen el recorrido.