Motor
Ley del Cambio Climático: ¿cómo afecta a los coches?
Obliga a los ayuntamientos de más de 50.000 habitantes a establecer una Zona de Bajas Emisiones en 2023, con restricciones a los vehículos más contaminantes. Pamplona ya está trabajando en la letra pequeña de la normativa estatal

Actualizado el 21/06/2022 a las 11:08
El cerco a los coches más contaminantes en las ciudades se estrecha. En 2023 entra en vigor la Ley de Cambio Climático, y la automoción está en el punto de mira. Las nuevas Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) de las ciudades de más de 50.000 habitantes podrían limitar la libre circulación de los vehículos de combustión, que representan el 75% del tráfico urbano, según las estimaciones de MSI para Sumauto que recoge Europa Press.
Los ayuntamientos tienen claro el marco general de la normativa estatal, pero de ellos depende la letra pequeña de la movilidad medioambiental en la urbe. Es decir, cada ciudad tiene la última palabra para fijar los vehículos que no puedan circular por ella. Y también tienen libertad para definir las zonas restringidas al tráfico más contaminante.
Por lo tanto, esta ley, que afectará al menos a 149 municipios, Pamplona incluido, deja en el aire qué sucederá con la libre circulación urbana de los coches con etiqueta 'A', 'B' y 'C' que mayoritariamente circulan a diario por estos municipios, en los que residen más de 25 millones de personas, es decir, el 53% de los habitantes de España, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), informa Europa Press.
El Ayuntamiento de Pamplona ya está trabajando en ello, y ha licitado por cerca de 72.000 euros el proyecto que definirá los aspectos técnicos y normativos, así como las estrategias para su implantación paulatina. Además, plantean favorecer con esta acción la movilidad peatonal y ciclista, el transporte público y la mejora de la calidad del espacio público. Para tal fin, se ha acordado un presupuesto de licitación de 71.995 euros para 2022 y 2023.
La empresa adjudicataria se encargará de realizar un diagnóstico previo de la situación, que cuente con participación ciudadana, y que determine en qué punto se encuentra la ciudad en materia de emisiones contaminantes y calidad ambiental y del espacio público. Con ese análisis previo, se elaborará una propuesta de implantación de Zonas de Bajas Emisiones que, tras una labor de contraste con técnicos municipales y agentes sociales, dará lugar a una estrategia para su puesta en marcha en varios barrios de la ciudad en distintas fases.