"Imaginen que el Parlamento financiase un acto en el que se exhiben fotos de Franco"
Imagen que una institución pública como el Parlamento foral financiase, aunque fuera con únicamente un euro, un acto en el que se exhiben fotografías de Franco o símbolos fascistas. Constituiría un escándalo mayúsculo y lógico. Unos tres mil trescientos euros ha pagado el Parlamento para patrocinar un kilómetro de la Korrika, carrera popular en favor del euskera durante la que, un año más, hay quienes portan fotografías de presos de ETA y banderas con proclamas en favor del acercamiento de dichos presos. Además de ikurriñas y de las interpretaciones de la enseña de Navarra por parte de la izquierda abertzale, sin corona ni escudo. Por supuesto que no se debe caer en la generalización, pero con una iconografía así se politiza el euskera. Con la exaltación de asesinos y cómplices a través de sus retratos no se defiende ni promociona lengua alguna, se le endiña la peor campaña publicitaria en su contra. Se le hiere.
Unos tres mil trescientos euros. Exactamente 3.267 tan públicos como que le pertenecen a usted, lector de estas líneas. Ahí estaba ayer el presidente del Parlamento, Unai Hualde, abriendo marcha en el Paseo Sarasate. En su mano, el testigo de la carrera, adornado por la ikurriña. El presidente de un Parlamento al que se le llama ‘de todos’. A su lado, representantes de Geroa Bai, Bildu, Podemos e Izquierda-Ezkerra. Navarra Suma ha sido la única formación que ha votado en contra del pago. ¿El PSN? Bien, haciendo muñecos de nieve y leyendo en Internet citas de Schopenhauer, no vaya a incomodar a los socios que le permiten presidir Navarra.
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