Olmo Morales: "Aún se aplaude a los hombres por llevar a sus hijos al pediatra o al parque"

El tema da para mucho. Para hablar, reflexionar, opinar o incluso discutir. Cómo nos comportamos los hombres y las mujeres en la vida y en el trabajo, en la empresa y la familia, entre nosotros y con nuestros hijos. Qué hacemos y qué no, qué decimos y callamos es motivo de debate y, a veces, de divorcio. Pero lo curioso en este caso es que no sea una mujer la que habla de feminismo ni de cuestiones de mujeres. Sino un hombre que profesionalmente se dedica a estos asuntos. Olmo Morales Albarrán (Madrid, 1982) es un sociólogo especialista en terapia centrada en la persona, que lleva grupos de hombres para hablar sobre las denominadas ‘nuevas masculinidades’. Y que intervino recientemente en una jornada organizada por el Instituto Navarro para la Igualdad con el título ‘Intervenciones con hombres: un espacio para la revisión y el ajuste de objetivos’. Las que siguen son algunas de sus reflexiones. ¿Qué son las ‘nuevas masculinidades’ y por qué importan? La masculinidad es siempre una posición social privilegiada del hombre sobre la mujer. Es ficticio que la masculinidad sea igualitaria. La ‘nueva masculinidad’ es esa nueva forma de ser hombre que se presenta como un espejismo... No es real. Pero algo se ha avanzado y ya no hablamos del ‘macho ibérico’... Se ha hecho un estudio sobre el reparto de tareas domésticas y el 70% de los hombres confiesa compartir un reparto igualitario. Esa es su percepción pero ¿qué pasa con la realidad? De esas tareas, ¿cuánto tiempo dedican semanalmente las mujeres y cuánto los hombres? ¡Las mujeres invertís muchísimas más horas en las labores domésticas, el cuidado de los hijos y de los padres! De acuerdo. Ese es el diagnóstico. Pero, ¿cuál el tratamiento? Lo que se está promoviendo mediáticamente es que los hombres trabajemos con hombres el coste de la masculinidad. Por ejemplo, que podamos llorar en público. Pero el problema es que ese crecimiento personal, que está muy bien, no se revierte en una mayor igualdad. Y no está bien que se financie con fondos públicos destinados a paliar la violencia contras las mujeres. En dónde hay que poner el foco es en las relaciones de poder y en que los hombres seamos conscientes de que esos privilegios existen. ¿Se refiere al mundo laboral? ¡Claro! ¿Cuántos hombres renuncian a un puesto de responsabilidad por ser padres? Los hombres nos creemos que con ver la desigualdad y estar de acuerdo con el feminismo, ya somos feministas. ¡Pero hay mucho más! Muchas mujeres sufren malestares emocionales que no identifican y que tienen su origen en cómo está su relación de pareja. Hablemos ahora de madres y padres. Aunque se ha avanzado, sigue habiendo desigualdad... Al padre que va al supermercado o lleva a su hijo al pediatra o al parque se le considera un ‘padrazo’ y recibe un aplauso. ¿Y a la mujer que no va al parque? Se la tilda de ‘mala madre’. ¿Pero dónde está esa mujer mientras tanto? Seguramente haciendo un montón de tareas invisibles y no tumbada en el sofá. ¿Por qué se dedica profesionalmente a estos temas? He tenido sensibilidad por las injusticias sociales. Fue la pareja que tuve hace unos años la que me hizo ver estas desigualdades, que yo también practicaba. ¿En qué aspectos? En cosa sutiles, en tomar una decisión sin haberla consultado, en dar realidades por hecho. La teoría la domina, ¿y la práctica? Quiero pensar que lo hago mejor que la media pero no dejo descubrirme en pequeñas cosas, a las que hay que buscar solución. En cuanto te relajas un poco, te sale. Estar siempre alerta, cansa, desgasta y es agotador. La solución no es solo ir a un taller. ¿Qué cree que va a pasar con las nuevas generaciones de varones? Hay mucho que trabajar: el tema del amor romántico, las relaciones de pareja adolescentes (y el control con el móvil a chicos a chicas) o la pornografía. Hay menores que ya empiezan a consumir pornografía desde los 8 años (la media está en los 11). Esta realidad y que exista la prostitución, aunque no se vaya, genera la creencia de que el cuerpo de las mujeres es nuestro, aunque sea pagando. Primero es un toquecito en el pelo, luego un levantamiento de falda y se termina en el abuso sexual. A través del imaginario de la pornografía, se genera la visión de que esta realidad existe.

Olmo Morales: "Aún se aplaude a los hombres por llevar a sus hijos al pediatra o al parque"

Un hombre es un ‘padrazo’ por ir al parque pero a una mujer se la tilda de ‘mala madre’ si no va. Así lo cree Olmo Morales, especialista en ‘nuevas masculinidades’. "Hemos avanzado pero aún queda un largo camino por recorrer", recalca

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