Larrasoaña marcó tanto el camino vital de una de sus habitantes, que le ha devuelto el afecto en formato novela: la localidad navarra es la protagonista del libro Bosquejando recuerdos, de la joven esteribartarra María Blasco Gamarra.
Un público entregado y muy numeroso secundó ayer en Civican la presentación en sociedad de la primera novela de la autora, que padece una parálisis progresiva severa. Su padre, José Luis Blasco, fue el encargado de leer un escrito en su nombre, en el que apuntó que "tendréis que leer la gratitud en mi rostro y mi sonrisa".
Bosquejando recuerdosrealiza una mirada etnográfica sobre Larrasoaña desde la óptica de la niñez de María, que pretende rescatar la vida de un pueblo en el que a la gente se bautizaba con motes, se estaba a la fresca, había tertulias en la calle, el ultramarinos era el centro comercial del pueblo o la presa el paraíso soñado.
La novela es "una razón para saborear la vida de un pueblo solariego y peregrino", como afirmó el conductor del acto, el periodista Jesús Tanco, que rescata un apacible modo de vida que está cayendo en el olvido.
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A la izquierda, José María Blasco; en el centro, su hija María, y a la derecha, el periodista Jesús Tanco. SESMA
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