LA MÁXIMA
LA MÁXIMA
E NTRENADOR nuevo, victoria segura", dicen los sabios del balón. ¡Ja, ja, ja! Técnico nuevo y la vida sigue igual. Como la canción. Poco nuevo en el equipo rojillo y un partido que se nos vuelve a escurrir entre el sopor con la misma conclusión: derrota y a casa a lamernos las heridas. Parece que la suerte sigue empeñada en ponernos los cuernos... Entre los palos, Medina, los errores y las expulsiones no hay manera de lograr una victoria.
Camacho tiene mucho trabajo por delante para sacar punta a un equipo que no merece estar asomado al precipicio de Segunda División. Yo puedo darle un par de consejos que igual le sirven, aunque al final será el míster el que decida con qué cromos salta al campo.
El primer consejo sería que mire atrás. No podemos regalar un gol para los once minutos por una salida de Ricardo a cazar mariposas. Lo siento, chaval, pero Roberto merece una oportunidad. Vale, salvaste el 3-1, pero regalaste el primero que es el que nunca debe entrar.
Y segundo, Puñal tiene que sentarse en el banquillo sí o sí. Hay mucha calidad en el centro del campo y Patxi ya está de vuelta. Así de claro. Hay que tener algo más para jugar en el eje, y el de Huarte está fallón.
Del árbitro no vamos a decir nada, aunque para que te expulsen a un jugador en un penalti, tiene que haber ocasión clara de gol. Clara, no de espaldas. Pues eso.
Me siguen faltando 40 puntos para quedarme en Primera División.
A
1. LA CUARTA ROJA
2. FIN A LA SEQUÍA ANOTADORA
3. OCASIONES CLARAS
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