Llega al bastión de su padre con el regocijo de abrir la Puerta del Príncipe y la de Las Ventas esta temporada. A hombros atravesó primero, y por segunda vez en su carrera, la de Sevilla y después la de Madrid en el día de su confirmación en San Isidro. El joven Guillermo Hermoso de Mendoza (1999) hace el paseíllo esta tarde en la gran feria de su tierra. Su debut en una Feria del Toro en la que se pondrá a prueba y en la que se medirá ante sus paisanos en una fecha clave, junto a Leonardo Hernández y Roberto Arrendáis.
¿Qué significa para usted Pamplona y la Feria del Toro?
Desde que empecé en el rejoneo, debutar en los Sanfermines era un sueño. Esperemos que sea una tarde bonita. Va a ser una fecha que recordaré siempre.
¿La preparación estará siendo muy medida?
Torear en Pamplona conlleva una gran responsabilidad. Hay que pasar las máximas horas posibles encima de los caballos para que todo llegue en las mejores condiciones. Un punto a favor, que los Sanfermines son en julio y llegas con la temporada avanzada y más acoplado a los caballos.
Es la primera vez que su padre, Pablo Hermoso de Mendoza, no se anuncia en este festejo. ¿Pesa el ocupar su hueco?
Más que pesar se me va a hacer raro. Seguro que también a mucha gente. Es el primer año que no está anunciado desde que se instauró en Pamplona el festejo de rejones cuando él irrumpió. Por ello, tengo la responsabilidad máxima de estar a la altura. El reto es muy complicado.
¿Y le preocupa no estarlo?
A todos los artistas nos preocupa el no estar a la altura de lo que el público espera.
¿A quién se van a encontrar los aficionados?
A un chaval joven con la ambición de ser alguien importante. Con un estilo muy marcado al de mi padre, por los caballos que utilizo y porque él es mi profesor, pero con la garra de la juventud. Las cotas que mi padre ha conseguido son únicas, por eso es un ejemplo a seguir.
¿Le molestan las comparativas?
Es normal que hablen de ambos. Tengo asumidas las comparaciones y es un orgullo que me comparen con el más grande.
¿Cree que el aficionado le conoce ya como Guillermo y no como el hijo de Pablo?
Eso nunca lo voy a dejar de ser. Pero en el ruedo, por méritos propios, voy creciendo, y ya sí que mucha gente me conoce como Guillermo Hermoso de Mendoza.
¿Qué busca en el rejoneo?
Desde que empecé, intentar tener mi personalidad. Conseguir el estilo de mi padre realizando el toreo puro pero marcarlo con lo que yo sienta en cada momento.
¿Cree que ahora se busca más la vistosidad que el toreo clásico?
Yo comparto que se hagan ese tipo de faenas más artísticas de cara al público, pero teniendo en cuenta al toro. Por ejemplo, que no se hagan determinadas suertes en la otra punta de la plaza y se deje a un lado al rey de la fiesta, que en este caso es el toro.
¿Qué es lo más duro del rejoneo?
Tener una buena cuadra, y yo he tenido la suerte de contar con la de mi padre. Pero todo el trabajo que conlleva tener una cuadra de caballos a la altura es lo más duro. El trabajo y la constancia.
¿Cómo se siente después de abrir dos de las puertas más grandes del toreo?
Muy feliz. Pero no solo por esas dos puertas grandes que son las más importante sino también por el conjunto de la temporada. A Sevilla y Madrid hay que sumarle Arles, Nimes, Alicante, Torrejón de Ardoz… Esa regularidad en la temporada refleja el buen momento y lo a gusto que me estoy sintiendo en la plaza.
¿A qué saben?
A gloria, por todo el trabajo que hay detrás y por lo que significan en el palmarés de un torero. En esos momentos únicos sientes una felicidad inmensa.
¿Siente vértigo de estar en la cúspide?
No, porque me considero una persona realista. Sé que llevo muy poco en el rejoneo y por muchas cosas bonitas que me estén pasando ahora me quedan otras muchas que corregir para crecer.
¿Cómo se gestiona éxito?
Es lo más importante y difícil de la fama. Hay personas que empieza a lograr éxitos y esos triunfos son, al final, el inicio de su perdición. Lo primero que tiene que tener uno es humildad y saber tener los pies en el suelo. Mis padres siempre me lo han inculcado así. Tengo la cabeza bastante amueblada (ríe).
¿En qué caballos nos debemos fijar esta tarde?
Vienen a Pamplona ‘Disparate’ y ‘Berlín’, que son dos que ya han actuado en esta plaza con mi padre. También ‘Martincho’, que es un caballo de salida muy puro, y luego varios ejemplares nuevos que, si sale buena la corrida, puede que debuten.
Este año le hemos visto medirse con Diego Ventura en Francia. ¿Le gustaría hacerlo en Pamplona?
Yo nunca me he negado a torear con nadie. De hecho, el próximo 9 de julio toreo también con él en Arévalo (Ávila). No tengo ningún problema en hacerlo aquí.
¿El toreo es rivalidad?
Me considero una persona que cuando estoy toreando me crezco, e incluso cuando toreo con mi padre. Cuando él triunfa, ese triunfo también me hace espolearme porque no quiero dejarme ganar la pelea. Y eso es rivalidad, sacar lo mejor de ti y buscar tu perfección a costa de haber visto a otro triunfar antes y querer superarlo. Si solo te fijas en tus triunfos no te mides igual ni te exiges tanto.
¿Ha corrido el encierro?
Una vez me metí dentro e intenté correrlo, pero no fui capaz por la multitud. Cuando empezaron a llegar los toros la gente comenzó a empujarse y no pude ni salir corriendo y me quedé en la pared. Fue una sensación muy complicada y de miedo. De no saber qué hacer cuando venían los toros.
DNI
Guillermo Hermoso de Mendoza Tardienta. Natural de Estella (Navarra), nació el 13 de agosto de 1999. Debutó el 7 de agosto de 2016, en Estella. Tomó la alternativa el 5 de mayo de 2019 en Sevilla, ejerciendo de padrino su padre, el también rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza. Se confirmó en Las Venta el 29 de mayo de 2022, siendo madrina Lea Vicens.