Adiós al pañuelico hasta el año que viene
Miles de velas y pañuelos rojos se dieron cita a medianoche en la plaza del Ayuntamiento para despedir nueve días de celebración al ritmo del ‘Pobre de mí’. Una mezcla de tristeza, pero también ilusión pensando en el próximo 6 de julio



- Beatriz Jordán
Pamplona despidió este sábado sus fiestas con el tradicional ‘Pobre de mí’, una cita que pone el broche de oro a nueve días de celebración. Una marea blanca y roja inundó la Plaza Consistorial y, con miles de velas en alto, llegó el momento se soltar el nudo al pañuelico y alzarlo al son del ‘Pobre de mí’.
Al igual que todos los años, la medianoche del 14 de julio impregnó el ambiente de una mezcla de emociones. Ojos brillantes, rostros apenados por el fin de los que son para muchos los mejores días para estar en Pamplona y otros, con la esperanza de descansar tras estar varias noches sin dormir.
Justo antes de que se abriera el balcón consistorial se escucharon leves pitos pero cuando aparecieron los representantes de las cuatro candidaturas del chupinazo: Motxila 21, quienes dieron comienzo a las fiestas en ese mismo lugar; ‘Rastrojo’, Chrysallis Nafarroa y Los Amigos del Arte, se hizo el silencio. Acompañados por el alcalde Joseba Asiron, que cedió el protagonismo a sus invitados, pronunciaron: “¡Pamploneses, pamplonesas, ya se han terminado los Sanfermines¡ ¡Viva los Sanfermines de 2019!”, en castellano y en euskera. Después, se entonó el ‘Pobre de mí’. Cuando Asiron abandonó el balcón, se volvieron a escuchar algunos pitos.
Si el chupinazo marca el inicio, el ‘Pobre de mí’ determina el punto final. El vallado se ha retirado y el encierro se ha convertido en un frágil recuerdo que se resiste a desaparecer. La comparsa también se ha despedido y de la Ciudadela estallaron los últimos fuegos. Tras nueve intensos días de experiencias, historias y ‘momenticos’, terminan los Sanfermines. A partir de hoy, Pamplona vivirá una nueva transformación. Más o menos lo habitual, salvo una grata salvedad: la zona azul no funcionará entre los días 15 y 31 de julio.
Las fiestas finalizan por todo lo alto. Han sido días tranquilos. “Hemos visto en la calle más seguridad y a la gente más tranquila”, describía un taxista la madrugada del viernes. En cualquier caso, ya falta menos, 356 días en concreto, para que Pamplona vuelva a transformarse y estallen de nuevo estas fiestas sin igual.
- Vídeo: El ‘Pobre de mí’ de los Sanfermines 2018
- Galería de imágenes: Fotos del ‘Pobre de mí’ que despide los Sanfermines 2018