Automoción
Volkswagen ratifica el plan para fabricar dos SUV eléctricos en Landaben
No hay competición por los modelos: Landaben hará la versión SUV del VW ID.2 y Martorell el modelo convencional que tendría un nombre similar

Actualizado el 10/06/2022 a las 08:03
La falta de concreción en torno a los distintos coches de baterías que se fabricarán en Landaben y Martorell a partir de 2025, dentro del impulso de los fondos europeos de recuperación a través del PERTE, y la confusión provocada por una noticia de La Tribuna de Automoción, que exponía que Martorell va a fabricar el Volkswagen ID.2, ha llevado a aclarar que ambas factorías ensamblarán dos coches diferentes con una denominación similar. Así, Martorell producirá el turismo convencional de baterías de Volkswagen mientras que Landaben se encargará de la versión SUV, con el que compartirá un nombre muy parecido. Ambas empresas del grupo Volkswagen negaron estar compitiendo por los modelos eléctricos pequeños.
El malentendido comenzó con la noticia de La Tribuna de Automoción en la que se recoge que el Volkswagen ID.2 se iba a producir en Martorell. La información hacía referencia a la presentación de los modelos de Cupra en Barcelona, donde intervino el presidente de Seat, Wayne Griffiths. Fuentes de Seat negaron ayer que el presidente de la compañía hubiera citado en ningún momento el nombre del modelo ID.2 en su intervención. En septiembre del año pasado en el salón del automóvil de Munich, se presentó el ID.Life que, según reflejó toda la prensa del motor internacional, se identificaba claramente como un adelanto del ID.2 y como futuro SUV pequeño eléctrico de la marca Volkswagen. De hecho, sus dimensiones eran prácticamente calcadas, salvo por ser un poco más ancho, a las del T-Cross que se fabrica actualmente en Landaben.
EXCEDENTE DE PLANTILLA
En diciembre del año pasado, el propio presidente ejecutivo del grupo Volkswagen, Herbert Diess, ya dijo que Martorell iba a centrarse en la producción de tres coches pequeños eléctricos convencionales de Cupra, Volkswagen y Skoda y Landaben se encargaría de la producción de los SUV eléctricos pequeños de Volkswagen y Skoda. Ahora llega la ratificación en un contexto en el que Griffiths reconocía que se estaban haciendo esfuerzos para llevar más carga de trabajo a la factoría catalana, que afronta un importante problema de excedente de plantilla cifrado en 2.800 empleados.
No obstante, fuentes cercanas a Volkswagen Navarra insistían ayer en que no existe ninguna rivalidad por los coches eléctricos pequeños del grupo Volkswagen, cuyo reparto entre Landaben y Martorell quedó meridianamente claro en diciembre. Asimismo, insistían en la buena relación entre ambas fábricas. Fuentes de Seat reiteraban también que existe una “sintonía absoluta” entre las plantas de Landaben y Martorell en el proyecto de electrificación, “un proyecto de país” en el que trabajan “juntos”.
Nuevo cierre el próximo lunes por falta de piezas
La falta de columnas de dirección obligará a Volkswagen Navarra a parar la producción el próximo lunes. Al igual que ha sucedido esta semana, la empresa pretende que este cierre quede cubierto por una jornada industrial (laborable sin producción) que se trasladaría del calendario de diciembre, una maniobra con la que se evitaría recurrir al Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) vigente hasta el 30 de junio. Con la parada del lunes, la planta de Landaben acumulará siete días de cierre por falta de piezas, correspondientes al 24, 27 y 28 de enero, 27 y 30 de mayo y 6 y 13 de junio, y otro más por la huelga del transporte (21 de marzo).
Debido a ello, la fábrica ha dejado de terminar unos 11.500 coches menos de los previstos en lo que va de año, para el que estaba previsto completar 304.664 unidades en total. Si además se tiene en cuenta que comité y dirección tienen asumido que será necesario prorrogar el ERTE a la segunda mitad del año ante la evidencia de que van a persistir los problemas de suministro, cada vez resultará más complicado ajustar el calendario laboral sin renunciar al objetivo de producción. Por el momento, la empresa no ha anunciado oficialmente ningún recorte en ese sentido.
Los problemas de suministro de microchips y otras piezas debido a la congestión mundial provocada por la covid viene afectando intermitentemente a la actividad de la planta desde que se retomó la actividad tras el primer confinamiento. Pese a la mejoría que se venía registrando en los últimos meses, el empeoramiento de los contagios en China, que afectó con especial virulencia al estratégico puerto de Shanghai, ha intensificado la incertidumbre en el sector del automóvil.
Debido a los problemas de suministro de piezas, Volkswagen Navarra terminó el año pasado con 21.544 coches menos de lo previsto y solo pudo completar 221.122: 141.379 T-Cross, 70.899 Polo (de los que 28.609 fueron del modelo rediseñado) y 8.844 Taigo. De los dos modelos más rentables para la fábrica, T-Cross y Taigo , la factoría de Landaben tuvo que recortar la producción asignada del primero en 29.542 coches y en 1.919 del segundo, que se compensó con más Polos.