La huella del silencio y la memoria en El Sario

Dos proyectos artísticos diferentes pueden convivir en un mismo espacio expositivo si las manos que los han creado pertenecen a la misma persona. Aunque han transcurrido más de cinco años desde la primera pieza de 'Naturaleza tejida' hasta la última creación de 'Cuando los sueños miran a los ojos', todas las obras son capaces de establecer un diálogo entre ellas porque comparten un mismo hilo conductor. No es otro que la carga emocional que Ángela Moreno imprime a cada una de sus obrasque, a través del grabado, la tinta china o el hilo, evocan pensamientos y sentimientos que tienen que ver con la ausencia y la memoria, pero también con el tejido, la naturaleza y el silencio. El edificio El Sario es testigo de esta convivencia plástica con la nueva exposición de Ángela Moreno en la que la artista presenta 25 obras tras realizar una selección de piezas de sus dos últimos trabajos, diferentes en contenidos, pero similares en cuanto a técnicas y materiales. “La mano es parecida en los procedimientos, pero la cabeza es diferente en cada momento. Y ello implica que también es distinto lo que quiero contar”, explica la autora. MUJERES DE SU FAMILIA La exposición es una invitación a la mirada pausada a cada una de las obras que la componen ya que todas ellas encierran un trabajo minucioso. Adentrarse en Naturaleza tejida implica conocer un proyecto iniciado en 2016 en el que conviven el entretejido vegetal y los dibujos de puntillas junto con la tinta china, el grabado y los hilos metálicos tejidos con las técnicas del punto y el ganchillo. Unas sutiles composiciones sobre fondos claros pertenecen a 'Serie blanca', unas obras inspiradas en los árboles y bosques que Ángela Moreno inmortalizó en distintos viajes familiares que, con el paso del tiempo, se han convertido en una referencia vital. “Las imágenes siempre han sido para nosotros una forma de pensar, de vivir y también de expresar lo difícil que puede ser a veces seguir ese sueño”, señala la autora, que hace referencia a Jabier Villarreal, su compañero de vida y también artista. Las obras realizadas en acrílico y tinta china tienen su contraste con 'Serie negra', un conjunto de grabados realizados sobre un papel de varias capas y fibras que la artista raspa en su capa brillante para que aflore un fondo negro mate intenso en el que jugará la incidencia de la luz y el ángulo de observación para captar los motivos vegetales. Estas creaciones se completan con unas figuras de hilo de cobre tejidas con las que recuerda a las mujeres de su familia. “El hilo y el ganchillo son el medio para poder hablar de ellas, que han sido importantes en mi vida, tanto mi madre como la de Jabier Villarreal, de las que tanto aprendí. Quiero recordarlas como esas mujeres poderosas, transmisoras de conocimiento. Las mujeres de mi familia siempre han zurcido, remendado, cosido, tejido o tricotado. Me considero un eslabón de ese linaje y quiero poner en valor su importancia, además de reivindicar una mayor visibilidad social y artística”. BLANCO Y NEGRO La primavera de 2020 fue otra fecha señalada para Ángela Moreno, para quien el confinamiento no supuso un encierro, sino una terapia por lo que supuso recordar las ausencias y reencontrarse consigo misma. Fue entonces cuando inició 'Cuando los sueños miran a los ojos', proyecto que también está presente en la exposición a través de una selección de obras en las que trabaja con las mismas técnicsa y materiales que sus precedoras, pero que se diferencian por sus evocaciones. “Está la memoria, el tejido, la naturaleza y el silencio. Me sirven para hablar de mi identidad, de lo cotidiano y del mundo que me rodea”. Las piezas tejidas vuelven a estar presentes en su obra más reciente. Sobre fondos de tinta china o grabados, superpone distintos motivos tejidos con hilos de cobre o plata. La artista se deja llevar por el propio hilo y así surgen figuras que coloca sobre el lienzo con mucho cuidado, debido a la fragilidad del material que puede doblarse, retorcerse y perder la forma inicial. La creadora también juega con el contraste del blanco y negro en sus obras. Las piezas oscuras, en su mayor parte grabados, son un guiño a la naturaleza y a la propia existencia, mientras que el papel blanco es el soporte de unas obras dibujadas con lápiz y tinta china, en las que aparecen líneas, trazos y goteos, y que sugieren contrastes, como la noche y el día, la luz y la oscuridad o la imagen y lo imaginario. + ‘Cuando los sueños miran a los ojos’. Ángela Moreno Campus Arrosadía-Edificio El Sario. Hasta el 21 de abril. Horario: lunes a viernes, 8 a 21 h.

La huella del silencio y la memoria en El Sario

Más de veinte obras pertenecientes a dos proyectos de Ángela Moreno conviven en El Sario a través de una una exposición en la que la artista establece un diálogo entre grabados, piezas tejidas con hilo y tinta china y juega con el blanco y el negro

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