¿Plan Marshall para España?: qué es y por qué lo plantea Pedro Sánchez
El presidente del Gobierno hizo referencia a esta medida en su comparecencia del pasado fin de semana
Desde que se declarara el estado de alarma por la epidemia de coronavirus el pasado 14 de marzo, las dudas se han multiplicado sobre el futuro inmediato que les espera a los españoles, tanto a nivel sanitario como económico. Lo cierto es que las medidas de confinamiento y permitir la apertura únicamente de establecimientos que vendan productos de primera necesidad han hecho que diversos sectores económicos hayan empezad a resentirse.
Por ello, quizá, el pasado fin de semana Pedro Sánchez se refiriera a la urgencia de implantar un "plan Marshall" para reactivar la economía de todo el país. En su propia cuenta de Twitter, el presidente del Gobierno recogía así sus palabras: "Apostamos por un gran 'plan Marshall' para impulsar un proceso de reconstrucción social y económica en la #UE con todas las herramientas a nuestro alcance. Seguiremos defendiendo los intereses de España y Europa, que frente al #COVID19 son los mismos. #EsteVirusLoParamosUnidos".
Apostamos por un gran "plan Marshall" para impulsar un proceso de reconstrucción social y económica en la #UE con todas las herramientas a nuestro alcance. Seguiremos defendiendo los intereses de España y Europa, que frente al #COVID19 son los mismos.#EsteVirusLoParamosUnidos pic.twitter.com/F25ygtaGSh
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) March 22, 2020
Ante esta situación y puesto que Sánchez lo mencionó pero fue bastante breve, muchos españoles se han venido preguntando esta semana qué fue exactamente el llamado Plan Marshall y lo que podría suponer para nuestro país. Llamado European Recovery Program (ERP) de forma oficial, el Plan Marshall fue una maniobra de los Estados Unidos puesta en marcha en 1948 para ayudar a Europa Occidental tras el desastre que supuso para el viejo continente la Segunda Guerra Mundial. La cantidad donada ascendió a más de 12.000 millones de dólares y el programa estuvo vigente durante cuatro años. Las mayores inversiones recayeron en Reino Unido, Francia y Alemania y, aunque algunos son escépticos, los efectos positivos en la economía de Europa fueron una realidad.
Además de impulsar económicamente a lo países europeos, otro de sus objetivos fue evitar la expansión del comunismo. La iniciativa debe su nombre a George Marshall, por aquel entonces secretario de Estado de los Estados Unidos, que lideró su impulso ante el peso que empezaban a tener los regímenes comunistas, especialmente el que representaba la Unión Soviética.