Cine
Actualizada 15/09/2016 a las 15:32
La ermita de San Urbano, escenario del acto de cierre de un taller de cortometrajes
El proyecto, promovido por el Instituto Navarro de Deporte y Juventud, ha involucrado a cerca de medio centenar de personas
- DN.ES. PAMPLONA
La ermita de San Urbano, en Gaskue (valle de Odieta), será mañana el escenario del acto de cierre de un taller y concurso de creación de cortometrajes, una iniciativa novedosa dirigida a las y los jóvenes de los Valles de Odieta, Ultzama, Atez, Basaburua y Anue con el fin de que conozcan el patrimonio de su entorno y fomentar entre ellos el arraigo en su tierra.
El proyecto, promovido por el Instituto Navarro de Deporte y Juventud, con el lema 'San Urbano es para mí…', ha involucrado a cerca de medio centenar de personas: 16 jóvenes del valle y otros 16 especialistas en diversas materias y técnicas audiovisuales. También han colaborado voluntarios, principalmente personas mayores del lugar, que han aportado sus testimonios personales.
En el acto de cierre, previsto para mañana a partir de las 18 horas, se expondrá todo el proceso vivido, se presentarán los cortos realizados por los jóvenes y se procederá a la entrega de los premios a las cintas ganadoras. La jornada contará además con la ilustradora Maite Mutuberria, que se encargará de hacer en directo un mural colectivo para dejar testimonio de la experiencia vivida.
DESARROLLO Y PARTICIPANTES
Durante los días 20 y 21 de agosto se celebró en la ermita de San Urbano, bien de dominio público del Valle de Odieta, un campamento que sirvió como inicio al taller y concurso de cortos. Posteriormente, se realizaron sesiones de apoyo destinadas a introducirles en la creación de cortos, los días 27 y 31 de agosto y 9 de septiembre.
A través de diferentes sesiones, donde se alternaron juegos y charlas, las y los participantes conocieron la historia relacionada con San Urbano y su entorno y adquirieron conocimientos sobre la creación de cortos, su grabación y edición.
El objetivo final de la actividad es que las y los jóvenes aprendieran a valorar y preservar la riqueza patrimonial de su valle, y en concreto la de la ermita de San Urbano, e involucrarlas también en actividades de conocimiento y difusión de este patrimonio. La iniciativa buscaba además, fomentar el arraigo de las personas jóvenes en un marco rural intergeneracional.
Concretamente, participaron 16 personas: 12 jóvenes procedentes de diferentes localidades de los Valles de Odieta (Ziaurritz, Gaskue y Anotzibar), Ultzama (Iraizotz, Larraintzar e Ilarregi), Basaburua (Aizarotz y Arrarats), Atez (Ziganda), y Anue (Lantz), y 4 monitores voluntarios de entre 24 y 40 años de Gaskue e Ilarregi.
Acudieron, además, 16 invitados especialistas en las diferentes materias para generar el suficiente conocimiento técnico (de creación de cortos) y conocimiento histórico sobre la ermita de San Urbano y la región en la que se inscribe. Xabier Perurena (Harrix Film) y Pablo Iraburu (Arena Comunicación) se encargaron de introducirles en temas de cine; Amadeo y David Urdiain en fotografía; Koldo Villalva (Itarinatura) en naturaleza; Unai Otegi y Edurne Arzoz les introdujeron en la música, con un concierto de flauta y arpa céltica; y la cultura local se inyectó en el proyecto a través de gente mayor de la zona que ofreció voluntariamente sus testimonios, formas de vida, costumbres y fiestas cotidianas, así como sus vínculos con San Urbano (Ramón Larrañeta, Conchita Oyarzun, José López, Mari Carmen Mariñelarena, Patxi Oyarzun, Rosi Aliende, Maribel Mariñelarena y Nartxi Navarro).
También han colaborado en la actividad voluntarios de Gaskue, Erripa, Ziaurritz y Anotzibar, que contribuyeron a divulgar la actividad, animar a las y los jóvenes a acudir y equipar la ermita para las charlas, proyecciones etc., así como el Ayuntamiento de Odieta y la Mancomunidad de Servicios Sociales de Base Zona Ultzama.
El proyecto, promovido por el Instituto Navarro de Deporte y Juventud, con el lema 'San Urbano es para mí…', ha involucrado a cerca de medio centenar de personas: 16 jóvenes del valle y otros 16 especialistas en diversas materias y técnicas audiovisuales. También han colaborado voluntarios, principalmente personas mayores del lugar, que han aportado sus testimonios personales.
En el acto de cierre, previsto para mañana a partir de las 18 horas, se expondrá todo el proceso vivido, se presentarán los cortos realizados por los jóvenes y se procederá a la entrega de los premios a las cintas ganadoras. La jornada contará además con la ilustradora Maite Mutuberria, que se encargará de hacer en directo un mural colectivo para dejar testimonio de la experiencia vivida.
DESARROLLO Y PARTICIPANTES
Durante los días 20 y 21 de agosto se celebró en la ermita de San Urbano, bien de dominio público del Valle de Odieta, un campamento que sirvió como inicio al taller y concurso de cortos. Posteriormente, se realizaron sesiones de apoyo destinadas a introducirles en la creación de cortos, los días 27 y 31 de agosto y 9 de septiembre.
A través de diferentes sesiones, donde se alternaron juegos y charlas, las y los participantes conocieron la historia relacionada con San Urbano y su entorno y adquirieron conocimientos sobre la creación de cortos, su grabación y edición.
El objetivo final de la actividad es que las y los jóvenes aprendieran a valorar y preservar la riqueza patrimonial de su valle, y en concreto la de la ermita de San Urbano, e involucrarlas también en actividades de conocimiento y difusión de este patrimonio. La iniciativa buscaba además, fomentar el arraigo de las personas jóvenes en un marco rural intergeneracional.
Concretamente, participaron 16 personas: 12 jóvenes procedentes de diferentes localidades de los Valles de Odieta (Ziaurritz, Gaskue y Anotzibar), Ultzama (Iraizotz, Larraintzar e Ilarregi), Basaburua (Aizarotz y Arrarats), Atez (Ziganda), y Anue (Lantz), y 4 monitores voluntarios de entre 24 y 40 años de Gaskue e Ilarregi.
Acudieron, además, 16 invitados especialistas en las diferentes materias para generar el suficiente conocimiento técnico (de creación de cortos) y conocimiento histórico sobre la ermita de San Urbano y la región en la que se inscribe. Xabier Perurena (Harrix Film) y Pablo Iraburu (Arena Comunicación) se encargaron de introducirles en temas de cine; Amadeo y David Urdiain en fotografía; Koldo Villalva (Itarinatura) en naturaleza; Unai Otegi y Edurne Arzoz les introdujeron en la música, con un concierto de flauta y arpa céltica; y la cultura local se inyectó en el proyecto a través de gente mayor de la zona que ofreció voluntariamente sus testimonios, formas de vida, costumbres y fiestas cotidianas, así como sus vínculos con San Urbano (Ramón Larrañeta, Conchita Oyarzun, José López, Mari Carmen Mariñelarena, Patxi Oyarzun, Rosi Aliende, Maribel Mariñelarena y Nartxi Navarro).
También han colaborado en la actividad voluntarios de Gaskue, Erripa, Ziaurritz y Anotzibar, que contribuyeron a divulgar la actividad, animar a las y los jóvenes a acudir y equipar la ermita para las charlas, proyecciones etc., así como el Ayuntamiento de Odieta y la Mancomunidad de Servicios Sociales de Base Zona Ultzama.
Etiquetas
Comentarios
Te recomendamos que antes de comentar, leas las normas de participación de Diario de Navarra