CASCANTE
Actualizada 03/04/2015 a las 06:00
Celebrado el IV Festival de Jotas en homenaje a Virginia López
- Más de cien personas escucharon la treintena de jotas interpretadas; su hijo Senen Rafael Marco recibió un obsequio
- RAFA VILLAFRANCA. CASCANTE
Más de cien personas se dieron cita recientemente en el centro cultural Avenida de Cascante para asistir al IV Festival de Jotas en homenaje a Virginia López Bruna, una miembro de la Escuela de Jotas de Cascante que falleció el día 16 de abril del año 2011 a los 50 años.
En el certamen participaron la citada escuela local, dirigida por Julio Sánchez Clemente, que se acompañó del grupo Los Pamplonicas; la Escuela de Jotas de Cortes, encabezada por Soraya Castellano; y la Escuela de Jotas de Alfaro, que dirige Diego Urmeneta.
En el intermedio del certamen, que se prolongó durante más de una hora, Julio Sánchez le hizo entrega al hijo de Virginia López, Senen Rafael Marco López, un obsequio de parte de sus compañeros como “símbolo de unión”, en el que figuraba grabado el nombre de Virginia López, “que también está en el corazón de todos tus compañeros”, le manifestó el director.
De entre ellas destacó de una manera especial por su gran emotividad la entonada por Senen Rafael Marco, que estuvo dedicada su madre y recibió una de las mayores ovaciones de la tarde.
En el certamen participaron la citada escuela local, dirigida por Julio Sánchez Clemente, que se acompañó del grupo Los Pamplonicas; la Escuela de Jotas de Cortes, encabezada por Soraya Castellano; y la Escuela de Jotas de Alfaro, que dirige Diego Urmeneta.
En el intermedio del certamen, que se prolongó durante más de una hora, Julio Sánchez le hizo entrega al hijo de Virginia López, Senen Rafael Marco López, un obsequio de parte de sus compañeros como “símbolo de unión”, en el que figuraba grabado el nombre de Virginia López, “que también está en el corazón de todos tus compañeros”, le manifestó el director.
Una treintena de jotas
Los asistentes, entre los que se encontraban Manuel Marco y Virginia Marco, marido e hija de la fallecida, disfrutaron de más de una treintena de jotas que fueron interpretadas tanto en grupos como en dúos y de forma individual.De entre ellas destacó de una manera especial por su gran emotividad la entonada por Senen Rafael Marco, que estuvo dedicada su madre y recibió una de las mayores ovaciones de la tarde.