Las grúas de Liebherr 'escalan' el monte alemán más alto, el Zugspitze

El Zugspitze. El monte más alto de Alemania. Con una altura de casi 3.000 metros sobre el nivel del mar. Coronando ese punto se alzan dos grúas torres que salieron de la planta del polígono de Agustinos de Liebherr Industrias Metálicas y que necesitaron de un helicóptero para ser instaladas. Capaces de soportar velocidades del viento que pueden llegar a ser de 280 kilómetros/hora y las bajas temperaturas (hasta -25 grados), pueden levantar hasta ocho toneladas. Llevan un año instaladas y el objetivo es contribuir a la construcción de un nuevo teleférico, que estará listo para diciembre de 2017, para la estación de esquí que está ubicada en esa montaña. Alemania es uno de los principales destinos de las grúas de la empresa navarra. También lo son Austria, Francia, Irlanda, Egipto, Suiza, Polonia, Emiratos Árabes Unidos, Brasil, entre otros. También Turquía, donde en el aeropuerto de Estambul hay instaladas 10 grúas de un total de 60 que tiene el grupo para su construcción. La casi totalidad de la producción de Liebherr Industrias Metálicas (LIM), el 95%, va destinada a la exportación. Y va a seguir siendo así. Porque, aunque se recupere el sector de la construcción, eso no significa que haya demanda de grúas, “no hay más que levantarlas del suelo, donde hasta ahora permanecían tumbadas”. Así lo explican los directores generales de la empresa, el alemán Helmut Döllerer y el navarro Gabriel Iturralde. Por ello, el crecimiento que prevén vendrá motivado por el aumento del mercado exterior. La previsión que maneja la empresa es crecer el 10% en 2017, sobre los 56 millones de euros facturados en 2016. Esta cantidad, aunque inferior a los 118 millones de 2007, cuando la mayor parte del mercado era nacional, es ya superior a la obtenida en 2015, de 50 millones, y de los 34 millones obtenidos en el peor año de la crisis, 2010. El ejercicio 2016, para los directivos, ha marcado ya la salida de la crisis para la empresa al dejar atrás las pérdidas y conseguir ya beneficios. INVERSIÓN COTINUA A pesar de los años de crisis, la empresa ha seguido invirtiendo. “Cuando nos ha ido mal hemos invertido el tiempo para buscar mejoras competitivas”; añaden. Hay que tener en cuenta que en 2007 se fabricaban más de 1.000 grúas y en 2009, el peor año, menos de 100. A pesar de ello, las inversiones han continuado. En 2008 se destinaron 14 millones de euros en total para ampliar la nave en 7.500 metros cuadrados para poder hacer otros productos. Porque esta fue una de las alternativas para afrontar la crisis, “traer la fabricación de componentes de estructuras metálicas de otras plantas y de terceros, con lo que la plantilla empezó a trabajar en otras cosas”, explican Döllerer e Iturralde. Eran productos que se fabricaban para otras empresas del grupo, una de las ventajas de pertenecer a un grupo multinacional grande, en este caso, al grupo alemán Liebherr, con 40 fábricas de diferentes actividades repartidas por el mundo. Hormigoneras, componentes para grúas para barcos, para grúas para montar molinos de viento, diferentes tramos de grúas, torres de máquinas que perforan el suelo... “Ello nos ha permitido mantener el empleo”, apuntan. La plantilla se ha mantenido en los últimos 20 años sobre los 250 trabajadores. Hoy el 60% del personal trabaja en grúas y el resto lo hace en componentes para otras empresas del grupo. La mayoría trabaja a dos turnos y un 20% lo hace a tres. Con esta idea presente, en 2015, incluso con unos resultados en números rojos, se invirtió en I+D+i 3,8 millones de euros. En 2016 la empresa invirtió 3,7 millones de euros, la mayor parte a I+D, para desarrollo de nuevos productos, sus utillajes y máquinas específicas. En este ejercicio la inversión será de 1,8 millones de ellos, una cantidad también destinada para nuevos productos y su industrialización. Los directivos destacan la importancia de que, a pesar de ser una multinacional, el desarrollo esté ubicado en la planta de Pamplona que así no se limita a fabricar. Hay 15 personas que trabajan en I+D. “Sabemos que deslocalizar una fábrica es fácil. Lo difícil es llevarte una oficina técnica, un equipo de 20 personas, porque tardas años en constituir al equipo. Y el equipo técnico lo mantenemos aquí y desde aquí hemos diseñado para otras fábricas del grupo, como las de India o Brasil,” apuntan Döllerer e Iturralde.

Las grúas de Liebherr 'escalan' el monte alemán más alto, el Zugspitze

La empresa de Pamplona ha instalado dos grúas para construir un teleférico para la estación de esquí alemana

Rubén Peña: "Osasuna siempre ha sido mi primera opción"

Libertad provisional con cargos para el detenido por atropellar a Alejandro Valverde

Viva San Fermín, Gora San Fermín: origen y significado de las palabras que dan comienzo a los Sanfermines con el Chupinazo

El Barcelona oficializa el fichaje de Kessie hasta el año 2026

Detenido un hombre por robar en una farmacia y en una peluquería de Ripagaina