Alrededor de 800
inmigrantes de
origen subsahariano han intentado este lunes, a lo largo de toda la madrugada, entrar a
Melilla, un objetivo que no ha conseguido ninguno de ellos gracias al despliegue policial que se ha establecido, tanto en el lado marroquí como en el español.
Según ha informado la Delegación del Gobierno, el dispositivo antiintrusión de la
Guardia Civil se ha mantenido durante varias horas ante el avistamiento, desde las tres de la madrugada, de varios grupos de
inmigrantes que, por distintas zonas del perímetro fronterizo, han pretendido aproximarse a la
valla de
Melilla.
En concreto, se han divisado tres
grupos: uno de 400 por la zona de
Barrio Chino, otro de 200 por
Farhana y un tercero, también de 200, por
Beni Enzar.
La
Guardia Civil, al advertir la presencia de estos tres grupos, desplegó al helicóptero asignado a la vigilancia fronteriza, así como unidades de la Comandancia en
Melilla y a los módulos de refuerzo de la Agrupación de Reserva y Seguridad (
ARS).
Este despliegue, junto con el que desarrollaron en su territorio las fuerzas marroquíes, consiguió, según la Delegación, que ninguno de los grupos consiguiera acercase al
vallado.
La alerta se mantuvo hasta pasadas las 07.00 horas, dados los movimientos constantes de los
inmigrantes.
El
intento masivo de aproximación a la
frontera de
Melilla registrado este lunes es el segundo que se produce en lo que va de mes, después de que el pasado día 9 otros 500
inmigrantes, igualmente divididos en varios
grupos, protagonizaran un movimiento similar de aproximación a la
valla.
Selección DN+