El Consejo Nacional libio no se pone de acuerdo para formar el Gobierno
- Las tropas rebeldes se encuentran estancadas en su intento de acabar con la resistencia en Sirte y Bani Walid
- JORGE FUENTELSAZ . EFE. TRÍPOLI
La falta de consenso en el seno del Consejo Nacional de Transición libio (CNT) sobre la formación del Gobierno interino, cuyo anuncio estaba previsto para ayer, obligó a la máxima autoridad rebelde a posponer la constitución oficial del mismo y el anuncio del reparto de carteras ministeriales.
Tras intensas negociaciones llevadas a cabo en Bengasi, sede del CNT y a donde se desplazó el grueso del consejo, los responsables libios no lograron ponerse de acuerdo sobre el número de carteras, aseguró el portavoz, Yalal al Galal, ni sobre los nombres de algunos titulares, según indicó el primer ministro interino, Mahmud Yibril.
Yibril aseguró en rueda de prensa que se había decidido que las mujeres y los jóvenes estén representados, tanto en el nuevo Gobierno, que se encargará de dirigir los asuntos del país durante los próximos ocho meses hasta la celebración de elecciones, como en la administración.
Sin embargo, Yibril, que recibió a principios de agosto el encargo de diseñar un nuevo gobierno interino, no dio una fecha sobre el anuncio de la lista ministerial, y se limitó a decir que esperaba que los contactos terminaran lo antes posible.
El frente de guerra
Por su parte, Al Galal comentó que el anunció no tendrá lugar, al menos, hasta que el presidente del CNT, Mustafa Abdulyalil, y el primer ministro regresen del viaje que tienen previsto realizar a principios de esta semana a Estados Unidos para participar en la asamblea general de la ONU.
Mientras tanto, las milicias armadas rebeldes continuaron ayer con renovadas fuerzas sus ofensivas contra las ciudades de Sirte y Bani Walid, dos de los últimos enclaves aún controlados por las fuerzas leales a Muamar el Gadafi, aunque la desorganización obligó a los rebeldes a retomar posiciones en Bani Walid.
En esta ciudad, las heterogéneas fuerzas del CNT se encontraron con una fuerte resistencia, al igual que en Sirte, y los rebeldes tuvieron que replegarse desordenadamente ante los bombardeos con cohetes de las tropas gadafistas.
El retorno de los pilotos rebelados
El régimen de Muamar Gadafi les ordenó bombardear con sus misiles las protestas civiles contra el dictador. Sin embargo, aquel 21 de febrero decidieron desertar aterrizando sus cazas Mirage en Malta. Medio año después, los coroneles Ali al-Rabiti y Abdullah Salheen regresaron a Libia. Los dos pilotos fueron recibidos con aplausos, abrazos y regalos de docenas de compañeros, amigos y familiares a su llegada al aeropuerto de Mitiga. "Me dijeron exactamente que debíamos bombardear a la gente y dejarla morir. Le dije "bien", y cogí la información -el plan de vuelo-", explicó al-Rabiti en una rueda de prensa al llegar a Libia. El piloto libio está decidido a continuar su carrera en la fuerza aérea: "Seguiré trabajando como piloto para defender y liberar Libia y sus cielos, no para matar a su gente. Continuaré mi trabajo entrenando a la nueva generación de pilotos".