ACUERDO
Actualizada 09/03/2015 a las 10:04
Colombia y las FARC trabajarán mano a mano para desminar el país
- Se trata de un pacto histórico, ya que es el primer pacto tangible después de 26 meses de negociaciones
- Milagros López de Guereño. COLPISA. La Habana
El Gobierno de Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) alcanzaron un acuerdo histórico para trabajar mano a mano junto a la organización Ayuda Popular Noruega (APN) en el desminado de territorios. Después de más de 50 años de confrontación, el primer acuerdo concreto se conoció el sábado tras 26 meses de negociaciones. En todo este tiempo se han celebrado avances parciales pero eran meras declaraciones de intenciones o pura retórica mediática.
De ahí que este sea un punto decisivo en el proceso de paz, que llega también cuando la sociedad colombiana ha dejado atrás el rechazo para apoyarlo en un 70%. Gobierno y FARC pedían por separado el apoyo social después de acordar los puntos de la agenda sobre distribución de tierras, erradicación de drogas y participación política. El que refiere a las víctimas estaría a punto de cerrarse. Ahora el tema clave es el cese de la lucha armada, pendiente de acordar si los guerrilleros responsables de delitos graves deben ir a la cárcel o no.
Esa discusión se nutre de los informes que surgen de los encuentros cara a cara de altos mandos militares con 'comandantes' rebeldes. Ambas partes están oficialmente en guerra, por eso es muy importante su trabajo en el desminado.
Según el comunicado conjunto emitido por las partes, el acuerdo se da "para avanzar en la construcción de confianza y con el fin de contribuir a generar condiciones de seguridad para los habitantes que se encuentran en zonas de riesgo por la presencia de minas, artefactos explosivos improvisados, municiones sin explotar y otros restos de guerra". Nadie puede olvidar que Colombia es, junto a Afganistán, el país más afectado por las minas antipersona. Desde 1990 han causado más de 11.000 víctimas, entre muertos y heridos.
AMNISTÍA TEMPORAL
El plan de trabajo contempla que las FARC informen de la localización de las trampas letales. Gobierno y FARC seleccionarán un "número inicial" de lugares y "se priorizarán aquellos sitios donde la población tenga mayor riesgo".
La limpieza de artefactos se llevará a cabo por el Batallón de Desminado del Ejército Nacional de Colombia (BIDES). Según el comunicado, participarán miembros de las FARC "sin uniforme, sin armas y previa suspensión temporal de las órdenes de captura, de acuerdo con la ley, para brindar la información requerida".
El presidente Santos señaló ayer que es "un paso importante porque es necesario como demostración de que vamos por el camino correcto". El mandatario corroboró que las FARC se han comprometido a dar información para elaborar un mapa de las minas.
El sábado, el jefe negociador del Gobierno, Humberto de la Calle, se pronunció en términos similares sobre el "nuevo y decisivo" movimiento para el desminado, que "es un primer paso, pero un paso gigante hacia la paz. Esto es una muestra de que estamos trabajando en la dirección correcta".
Iván Márquez, el jefe de los plenipotenciarios de la guerrilla, también coincidía al valorar esta "jornada memorable" para el diálogo de paz. "Vamos por buen camino", dijo.
De ahí que este sea un punto decisivo en el proceso de paz, que llega también cuando la sociedad colombiana ha dejado atrás el rechazo para apoyarlo en un 70%. Gobierno y FARC pedían por separado el apoyo social después de acordar los puntos de la agenda sobre distribución de tierras, erradicación de drogas y participación política. El que refiere a las víctimas estaría a punto de cerrarse. Ahora el tema clave es el cese de la lucha armada, pendiente de acordar si los guerrilleros responsables de delitos graves deben ir a la cárcel o no.
Esa discusión se nutre de los informes que surgen de los encuentros cara a cara de altos mandos militares con 'comandantes' rebeldes. Ambas partes están oficialmente en guerra, por eso es muy importante su trabajo en el desminado.
Según el comunicado conjunto emitido por las partes, el acuerdo se da "para avanzar en la construcción de confianza y con el fin de contribuir a generar condiciones de seguridad para los habitantes que se encuentran en zonas de riesgo por la presencia de minas, artefactos explosivos improvisados, municiones sin explotar y otros restos de guerra". Nadie puede olvidar que Colombia es, junto a Afganistán, el país más afectado por las minas antipersona. Desde 1990 han causado más de 11.000 víctimas, entre muertos y heridos.
AMNISTÍA TEMPORAL
El plan de trabajo contempla que las FARC informen de la localización de las trampas letales. Gobierno y FARC seleccionarán un "número inicial" de lugares y "se priorizarán aquellos sitios donde la población tenga mayor riesgo".
La limpieza de artefactos se llevará a cabo por el Batallón de Desminado del Ejército Nacional de Colombia (BIDES). Según el comunicado, participarán miembros de las FARC "sin uniforme, sin armas y previa suspensión temporal de las órdenes de captura, de acuerdo con la ley, para brindar la información requerida".
El presidente Santos señaló ayer que es "un paso importante porque es necesario como demostración de que vamos por el camino correcto". El mandatario corroboró que las FARC se han comprometido a dar información para elaborar un mapa de las minas.
El sábado, el jefe negociador del Gobierno, Humberto de la Calle, se pronunció en términos similares sobre el "nuevo y decisivo" movimiento para el desminado, que "es un primer paso, pero un paso gigante hacia la paz. Esto es una muestra de que estamos trabajando en la dirección correcta".
Iván Márquez, el jefe de los plenipotenciarios de la guerrilla, también coincidía al valorar esta "jornada memorable" para el diálogo de paz. "Vamos por buen camino", dijo.