ENTREVISTA
Javier Errea: "No sentimos al periodismo tan necesario como antes"
El periodista navarro defiende a tiros el oficio del periodismo en su último libro 'El diario o la vida'

- Ana Isabel Cordobés. Pamplona
Javier Errea Múgica (Pamplona, 1966) es periodista, consultor estratégico de medios en Errea Comunicación, presidente del Capítulo Español de la Society for News Desing y coordinador de los Premios Malofiej de Infografía. Errea defiende a tiros el oficio del periodismo en su último libro 'El diario o la vida', una recopilación de entradas escritas en su blog Erreadas, desde el que analiza la profesión periodística con la mirada crítica que otorga la experiencia de haber trabajado en varios medios de comunicación.
En tu libro hablas de defender el periodismo a tiros, ¿tan mal está el oficio para tener que defenderlo así?
- No descubro nada si digo que la cosa está complicada, y precisamente por eso es momento de hablar claro. Defender a tiros es hablar claro, no me gusta andarme con rodeos y me parece que vale la pena, ¿no? Salir ahí a cara descubierta, y si te la tienen que partir, que te la partan.
La gran mayoría de medios de comunicación actuales está haciendo un lavado de cara. Se renuevan y cambian en lo formal, pero en el fondo, en el contenido ¿hay un déficit de calidad?
- Durante todos estos años de bonanza los diarios se han preocupado del envoltorio, han encargado rediseños, cambios estéticos, se compraban edificios, rotativas, plataformas tecnológicas… la inversión ha sido muy grande. Pero hemos descuidado lo que es nuestro, en lo que podemos dar un verdadero valor añadido, que es en el contenido. Este aspecto es puro sentido común. No estoy descubriendo nada nuevo que no sepan los periodistas, pero parece que se nos ha olvidado. Un rediseño se puede comprar en un supermercado, o un sistema editorial, pero los contenidos no se pueden comprar. La formación y la calidad de los periodistas no se compra en un mercado. Hay que formarlos, hay que tener paciencia, hay que orientarlos y hay que romperles los originales. Me pregunto cuántos originales se rompen hoy en día, porque a mí me rompieron muchos. Creo que algo de esto hay, y tiene que ver con la pérdida de influencia de los medios.
- Has tratado el tema de la formación de los periodistas. No sé si has detectado algún déficit en la parte universitaria o postuniversitaria, al ser un ejercicio que requiere un reciclaje continuo.
- Aunque siente un poco mal que diga esto, los periodistas somos personas que nos formamos poco. Desde que empecé de chaval en un periódico no he visto mucha motivación por la formación. Además, la formación tiene que venir impulsada por doble vía: la empresa anima pero tiene que haber automotivación. No sirve la excusa de que el medio no provee la formación, sino que hay que buscársela. Las generaciones que salen de Comunicación, aunque suene a comentario viejo, son mucho más diestras técnicamente, manejan las herramientas con una soltura impresionante, pero les falta perspectiva. Es gente que escribe peor, en general, porque ha leído menos, y esto son datos no es nostalgia. Por tanto aquí hay un camino importante, tenemos que valorar la técnica para que nos ayude a hacer mejor periodismo, pero no que la tecnología se justifique en sí misma. Es solo un canal, una herramienta para contar cosas.
- Hablando de aspectos de gráficos e infografía en los medios actualmente. Parece que existe una fuga de cerebros, como Alberto Cairo, Chiqui Esteban o Mariano Zafra, que están en América desarrollando visualización. ¿Existe tal fuga?
Nosotros coordinamos la cumbre de infografía Malofiej y conocemos a todos estos profesionales. Claramente hay una fuga. En los últimos años esta gente valiosa se ha dado cuenta de que no había espacio para el crecimiento o de que en sus medios no se les daban recursos suficientes para desarrollar su labor. Es algo para pensárselo, desde luego. El problema me parece mucho más grave. No es solo geográfico: no es que la gente se esté yendo, sino que mucha gente valiosa se está yendo de la profesión porque el dinero no está en los medios. El dinero se encuentra en los bancos, las empresas tecnológicas, que están fichando a grandes periodistas. ¿Esto qué demuestra? Por un lado que estos periodistas son muy buenos y por otro, que estas empresas son muy listas y por eso hacen estos fichajes. Se están descapitalizando los medios, y dejan que algunas de estas empresas les roben a algunos de sus mejores miembros. Por tanto, no es solo geográfico, sino que se van a Telefónica, al BBVA, al Santander…
- Y los que se quedan ejerciendo el periodismo en los medios ¿están unidos por mero romanticismo?
Se quedan por muchas razones. En los medios aún siguen quedando muy buenos profesionales. No se dan condiciones muy buenas para que estos buenos periodistas crezcan y ayuden a otros. Por eso, el Laboratorio que estáis llevando a cabo en Diario de Navarra me parece una iniciativa, aparte de pionera, valiente. También incierta porque hay que encontrar el espacio, pero valiente. No creo que una redacción sea el mejor lugar para desarrollar este tipo de proyectos, porque los periodistas somos bastante reacios a experimentos, somos gente complicada, todo nos parece mal y nos creemos gente muy sabida. En visualización hay un camino interesantísimo para explicar el mundo e interpretarlo mejor. Pero hay que hacerlo bien: el problema es que se nos demanda una altísima calidad y esto no es fácil.
- A veces en datos y visualización se busca el shock e impresionar al lector, pero comprometiendo el lado de contenido y comprensión.
- Sí, a veces la estética de la visualización puede más que la comprensión y entonces ya no cumplimos la función que tenemos. En Malofiej es algo que hemos discutido mucho. Algunos medios internacionales de gran categoría han caído en una máxima que era hacer cosas complicadas porque creían que cuanto más complicada fuera la visualización ellos eran mejores. Quizá se han quedado muy contentos, pero si el lector no entiende qué estás presentando, lo has hecho mal, por muy bonito a nivel visual que sea. La gente tiene acceso a lo que quiere, la cultura visual que se nos exige es enorme, por lo que no solo vale con presentar las cosas bien sino que tienen que estar bien hechas. El envoltorio tiene que ser bueno, pero también el contenido, es un asunto de fondo y forma.
- Algunos directivos de medios de comunicación defienden el periodismo a través de mantras que repiten allá donde van. Se recopiló en el “bingo del periodismo” y te pido que me muestres tu acuerdo o desacuerdo con sus frases. La primera es: “la Red es superficial, pero el papel profundiza”.
- Esto es una tontería como un piano. ¿Quién decide que Internet es para lo urgente y el papel para lo reposado? Eso es un argumento defensivo de la gente del papel. Tú puedes ser lo que quieres donde quieres.
- El segundo es “prefiero ser el mejor que el primero”.
Todo depende. Si me tengo que quedar con algo es con ser el mejor, pero muchos luchan por ser el primero. Dicen que quien da primero da dos veces, pero es muy relativo. Creo que es más importante darlo bien. La gente no está pendiente de ver qué medio lo publicó antes.
- La siguiente es que “El periodista multifunción es el futuro”. Si se exige por otro lado la especialización, ¿cómo casamos ambas cosas?
Es un tema polémico. Nos piden ser multifunción, estar con el móvil tomando fotos, haciendo cortes de audio. Es un error, no creo en el periodista multifunción porque me parece una esquizofrenia. Lo mejor que sale de nosotros es cuando uno sabe a qué se quiere dedicar. Si te repartes en varias funciones harás las cosas de forma mediocre. El periodista debe tener la cabeza puesta en una sola cosa. Antes de existir Internet al periodista de papel no se le pedía estar en la radio, ¿por qué ahora te piden estar en todos los medios? Lleva a una pérdida de calidad.
- También dicen que “los textos son para leer. Mejor largos”. En los medios remodelados sí se tira hacia el scroll-down, al estilo anglosajón. ¿Esto cómo casa en Internet?
Yo no estoy a favor de textos largos porque sí. Tendrá que ser largo o corto en función de lo que estés contando y del medio. Durante algunos años sí se le dieron al lector varios caminos en las narrativas, e iba de texto en texto, pero hay que favorecer la concentración del lector. Si tienes un texto largo pero tienes miles de clics para ir a un texto o a otro es un lío. Simplificar la narrativa en Internet es bueno, pero eso no significa que el texto tenga que ser largo o corto. El scroll-down depende solo de una lectura más o menos sosegada.
- La última frase de este bingo es “que estamos en la Edad de Oro del periodismo”, pero tú lo defiendes en tu libro a tiros. ¿Con qué nos quedamos?
No estamos en la Edad de Oro del periodismo, hay una crisis profunda del periodismo. Hay buenísimos profesionales, pero la industria está en una crisis muy profunda. Está intentando buscar su función, que está clara, pero nos complicamos la vida en buscarla a nivel empresarial. El periodismo no es tan necesario como antes, o no lo sentimos tan necesario como antes. Además la gente se conforma con cualquier cosa. No hemos sabido diferenciarnos de otros actores distintos al periodista. Hay que dar un puñetazo en la mesa y ofrecer algo para decir que el valor añadido es otro, no es lo que ofrecen otros actores.