"He encontrado el camino"
- Edurne Pasaban impartió ayer una conferencia en la Upna: "Soy feliz y esto me motiva a continuar", dijo
- EFE. PAMPLONA.
La montañera guipuzcoana Edurne Pasabán, la primera mujer del mundo en ascender los catorce ochomiles, afirmado ayer que su vida "ha sido mucho más" que completar este reto, al destacar que ha encontrado "el camino de lo que quería hacer" y de lo que le hacer ser "feliz".
"He sido la primera mujer en el mundo en terminar los catorce ochomiles. Para mí, mi vida ha sido mucho más. He encontrado el camino de lo quería hacer y el camino de lo que me hacía feliz", destacó Pasabán en una conferencia ofrecida en la Universidad Pública de Navarra.
En este sentido, comentó que "en estos momentos de crisis a veces está mal" expresarse así, pero ha subrayado: "Soy feliz y esto es lo que me motiva a continuar haciendo cosas".
Humildad y compromiso
Pasabán, de 38 años, señala que no entiende los retos "sin humildad y compromiso" y ha indicado que este último concepto es "esencial" en el sentido de preguntarse "qué voy a hacer para que las cosas ocurran".
Resaltó que aunque la palabra ambición "suena fea" es necesario tenerla para completar los retos: "He tenido mucha ambición para terminar los catorce ochomiles", ha asegurado.
La alpinista tolosarra asevera que ha aprovechado "todas las oportunidades" que le han llegado y que la propuesta de 2004 de "Al filo de lo imposible" de Televisión Española le cambió la vida.
Lo mejor, subraya, "ha sido el equipo" que ha formado: "Gracias a ellos estoy aquí y he podido terminar el proyecto", ha señalado Pasabán, quien no se ha querido olvidar de "los invisibles", en alusión a los porteadores, ya que, según ha precisado, "sin ellos no llegas".
Comentó que es necesario "adaptarse a los cambios sin buscar excusas" como cuando en 2009 Televisión Española canceló la financiación de sus expediciones, veintidós en total en la carrera deportiva de Pasabán.
"En muchas hemos vuelto sin cumbre, pero no son un fracaso. Hay que aprender de ellas y hacer autocrítica", ha puntualizado.
Pasabán, que indicó que solo se gana la vida como montañera desde 2009, ha apuntado como "momento más difícil" cuando sufrió una depresión tras bajar del K2 con congelaciones, lo que implicó la amputación de dos dedos. "Caí en una depresión bastante grande y estuve cuatro meses en el hospital. De ahí, sales tú y también te saca la familia y los amigos", ha concluido Pasabán.
La nota
Ingeniera y conferenciante. Edurne Pasaban (Tolosa, 1973) se formó como ingeniera Técnica Industrial en la Universidad del País Vasco, completo el Senior Executive Program y es Máster en Recursos Humanos en el ESADE de Barcelona. Ha trabajado de ingeniera en la empresa de maquinaria de su familia. Creó un pequeño hotel rural y restaurante, cuya gestión compagina con su trabajo como profesora asociada en el IE Business School en Madrid y como conferenciante.