BALONMANO
Agradecimiento del Itxako por los apoyos para jugar en Anaitasuna
Para obtener el visto bueno final se tendrá que ampliar el actual aforo del pabellón con unos 500 asientos más
- EFE PAMPLONA
El Itxako confirmó ayer oficialmente que el partido de vuelta de la final de la Liga de Campeones ante el Larvik se jugará el 14 de mayo (19.00h) en el pabellón Anaitasuna como su "casa", después de que la Federación Europea de Balonmano (EHF) haya aceptado inicialmente la homologación del mismo.
Eso sí, el organismo europeo exige la instalación de otras 500 plazas más para ampliar el aforo de aficionados sentados que tiene esa instalación y para que llegue a los 3.000 (cifra exigida por la normativa de la federación).
Después de unos días de intensas gestiones, Miguel Bujanda (presidente del Itxako) agradeció ayer en nombre del club estellés todos los apoyos recibidos para hacer posible esta decisión, especialmente el de la directiva del club Anabel Calanda -enviada a la sede de la EHF-, Federación Española de Balonmano, el Gobierno de Navarra y la sociedad Anaitasuna.
Bujanda, en una rueda de prensa compartida con la consejerea Maribel García Malo -quien se comprometió a ofrecer todo el apoyo posible al equipo- y Javier Labayru (presidente de Anaitasuna), aseguró que todo esa labor ha conseguido hacer ver a la EHF la conveniencia de que el Anaitasuna acogiera la final de la Champions dado que pabellón de Estella no cumple con los requisitos mínimos.
Bujanda calificó esta final de mayo de momento histórico para el balonmano femenino navarro yrecordó que el lugar que la acogerá ha visto pasar por él a grandes jugadores, pero nunca una final de la Champions.
Por ello aventuró que el encuentro frente al Larvik va a ser muy especial para todos en este escenario.
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