La Vuelta al Plantío reúne a 250 atletas
El cross de San Adrián celebró el domingo su quinto aniversario con récord de participación en la carrera absoluta (143). En cadetes, Jorge Mario Martínez (Lodosa) logró el primer puesto a pesar de correr descalzo la mitad de la carrera.
- MARI PAZ GENER . SAN ADRIÁN
EL corredor marroquí Jaouad Boualame del club Ribera Atlético de Tudela fue el ganador de La Vuelta al Plantío de San Adrián, una prueba que el pasado domingo celebró su quinta edición. Jaouad Boualame, que ya logró el primer puesto en la primera edición del cross ribero en el 2007, completó los 5 kilómetros del recorrido entre la avenida de Navarra y el término del Plantío en 15 minutos y 26 segundos. En segundo lugar entró en la meta Daniel Sanz Elduayen -del Besti-Iruña de Ansoáin- en 15¿48¿¿, que también fue el primero en veteranos. El tercer puesto fue para Hichan Errachid, del Club de Atletismo de Lodosa, con 16¿08¿¿.
En féminas, la primera en llegar fue Elena Silvestre Soriano, de Teruel, que completó la carrera en 18¿13¿¿. El segundo lugar fue para Ana Gayarre Aguirre, del ICN de Pamplona, con 18¿35¿¿ y el tercero para María del Olmo Vidondo Torrecilla, del Atletismo de Azagra, con 19¿56¿¿. El primer corredor local en cruzar la meta fue Iñaki Martínez Jiménez y Olga Gimeno Hernández, la mejor atleta de San Adrián.
La prueba estuvo organizada por el Ayuntamiento con la colaboración del club de atletismo. Participaron un total de 250 corredores de clubes de Navarra y La Rioja en las diferentes categorías desde promoción. En la carrera absoluta tomaron la salida 143 atletas seniors, veteranos y mujeres. Se entregaron camisetas a todos los participantes, trofeos a los tres primeros de cada categoría y premios de 130, 100 y 75 euros a los primeros en senior, veteranos y féminas.
Sin zapatillas
La anécdota de la prueba la protagonizó el joven Jorge Marín Martínez, de 13 años y vecino de Lodosa. Marín, que tomó la salida en la categoría de cadetes, perdió las zapatillas a mitad de la carrera, un obstáculo que no le impidió entrar en la meta el primero ante el asombro primero y el aplauso, después, del público que esperaba en la Avenida de Navarra. "Se me aflojaron y vi que se me salían, pero decidí seguir adelante", comentó el corredor.
Durante la celebración de la prueba, la asociación de amas de casa de San Adrián repartió chocolate caliente entre corredores, familiares y el resto del público asistente.