El edil de Villava puede presentar alegaciones ante la Comisión Federal de Ética y Garantías e incluso no descarta "acudir a la judicial"
La ejecutiva federal del PSOE ha notificado al concejal de Villava José Luis Úriz su expulsión del partido después de que éste dedicara el cohete de fiestas de la localidad el pasado mes de octubre al dirigente de la izquierda abertzale Arnaldo Otegi.
La dedicatoria la hizo Úriz mediante un comunicado enviado a los medios antes del chupinazo que debía lanzar y en el que justificaba su recuerdo a Otegi, entre otros políticos como los socialistas Tomás Gómez y Odón Elorza, por el trabajo que a su juicio éste estaba llevando a cabo para conducir a Batasuna por la senda de la paz.
Una idea a la que no hizo mención durante el chupinazo, en el que sí se refirió a la satisfacción que le suponía que en el acto estuvieran presentes políticos tan dispares como los presidentes de UPN y PP de Navarra junto a abertzales como Pernando Barrena y Santiago Kiroga.
Aunque estos dos últimos acudieron invitados por los concejales de la ilegalizada ANV, el agradecimiento a su presencia ha sido esgrimido por el PSOE como segundo argumento para la expulsión, aunque hace "una lectura parcial", según Úriz, ya que sólo tiene en cuenta que citó a los miembros de Batasuna y no a todos los representantes políticos.
"Algo muy profundo está fallando en este partido", ha dicho hoy el edil en declaraciones a Efe, en las que ha confirmado que la resolución le notifica la expulsión del PSOE como "definitiva" pero le da 10 días para que pueda presentar alegaciones ante la Comisión Federal de Ética y Garantías.
Una vía que José Luis Úriz ha asegurado que agotará, al tiempo que no ha descartado "acudir a la judicial" si el partido no modifica su criterio.
En este sentido ha subrayado que entiende una expulsión por incumplir las normas, "pero es inadmisible por dar una opinión".
Y de hecho ha apuntado que con este asunto el PSN "ha metido al PSOE en un lío" por su "empecinamiento por quitarme de en medio" ya que, ha precisado, "soy una persona incómoda para una dirección que no entiende que el PSN debe tener la riqueza y la pluralidad suficientes como para que alguien como yo forme parte del partido".
En espera de cómo se resuelva finalmente el asunto, Úriz ha adelantado que a su juicio "sigue perteneciendo al partido" y por lo tanto continuará como concejal del PSN en Villava y, salvo que el secretario municipal le indique otra cosa, como portavoz del PSN en este consistorio, un cargo y un escaño a los que renunciará "a los 10 segundos" de la resolución definitiva si es contraria a sus tesis tanto en el ámbito interno como en los tribunales en caso de llegar a ellos.
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