El ayuntamiento de Tudela dio ayer un nuevo paso para ocupar el parque de la Champiñonera si la adjudicataria Obenasa no repara las deficiencias detectadas por el consistorio. La Junta de Gobierno Local aprobó una certificación de obra de 30.734 euros y resolvió las discrepancias entre la empresa y la dirección de obra posicionándose "de acuerdo con la dirección de obra", según indicó el alcalde, Luis Casado.
Se emplazará a las dos partes para que comparezcan en la obra el 5 de noviembre "a fin de proceder, de ser posible, a la recepción de las obras o a los efectos previstos en la legislación contractual", dijo. "Se entiende que como la empresa ya ha dicho que no va a terminar esa obra, se autorizará a la dirección de los trabajos a hacer un informe sobre lo que falta por hacer", matizó. No obstante, indicó que "el 5 de noviembre sabremos si la empresa va a ejecutar lo que queda. Si no lo hace se ocupará el parque, aunque no ese día porque hay que dar los pasos reglamentarios".
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