El aula de poesía de Estella se inicia con tres personas y la promesa de más adhesiones

De izquierda a derecha, Carmen Puerta Estremera; Caya García Suberviola y Valentín Echarren García. DN

"En el Ateneo Navarro cuando Isabel Blanco Ollero fundó en 1999 el grupo de poesía, a la primera reunión acudieron tres personas. Actualmente, hay una media de quince que han pasado de juntarse un único día al mes a hacerlo cuatro. Así que esto es un buen augurio", decía ayer Carmen Puerta Estremera a las otras dos personas que habían respondido a la puesta en marcha del aula de poesía de Estella en la casa de cultura Fray Diego.

Junto a Carmen Puerta, edil de Cultura de Barbarin de 45 años y colorista de profesión, se encontraban Valentín Echarren García, estellés jubilado de 74 años, y Caya García Suberviola, antigua profesora infantil de 60 años y vecina de Mendavia. Habían excusado su presencia varios miembros del grupo de poetas de Tierra Estella -inmersos en los preparativos de una obra de teatro- además de una joven. Se espera contar con ellos en la que será la cita habitual del colectivo: el segundo martes de cada mes, a las siete de la tarde en la casa de cultura.

Obra publicada

Las tres personas de ayer compartían la experiencia de ver su trabajo publicado. En el caso de Carmen Puerta, tres poemarios, además de ser finalista en una antología que, a nivel nacional, se editará con el nombre de Lágrimas escritas. Por su parte, Valentín Echarren sacó a la luz una selección de sus 900 poesías en el libro Crepuscular mientras que Caya García ha impreso tres libros con versos dedicados a los niños.

El aula cuenta a con el respaldo de la comisión municipal de Cultura de Estella, que cede el espacio y material para, en palabras de los tres integrantes de ayer, crear un lugar de encuentro de poesía. "Queremos compartir una afición que nos apasiona y de la que podamos aprender unos de otros. Está abierta a todo el mundo, también al que le gusta leer u oír poemas", aclaró Carmen Puerta. "Y aunque se piense que el verso es minoritario, mucha gente escribe. Sólo que le da vergüenza mostrarlo".