Su defensa alega que no existen indicios racionales que justifiquen su procesamiento por las muertes de dos guardias
La defensa de Jaime Giménez Arbe, El Solitario, sostuvo ayer que "no existen indicios racionales" que justifiquen el procesamiento del acusado por los asesinatos de dos guardias civiles en Castejón en 2004 y solicitó su "inmediata puesta en libertad", solicitud a la que se opusieron tanto el fiscal como la acusación popular.
Así se pronunció la representación de El Solitario en la vista que tuvo lugar en la Sección Primera de la Audiencia de Navarra para estudiar el recurso contra el auto de procesamiento. La letrada de Giménez señaló que para echar atrás el auto son suficientes las manifestaciones de su cliente ante el juez de Tudela que instruyó el caso y le procesó, ante quien declaró que el responsable de los asesinatos era un francés cuya identidad sólo revelaría a las familias de las víctimas.
Fiscal y acusación popular, ejercida por la Asociación Independiente de la Guardia Civil, pidieron la ratificación del auto. Así, el fiscal superior, Javier Muñoz, se refirió, entre otras cuestiones, al arma que llevaba cuando le detuvieron en Portugal, la misma que se utilizó para matar a los agentes y la empleada en un tiroteo en Castellón que El Solitarioreconoció haber protagonizado. Sobre la versión del acusado apuntó: "Hay que hacer un acto de fe sólo para entenderla".
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