La Federación de Regantes se compromete a tomar medidas de carácter voluntario para ahorrar en el consumo
Los regantes de la cuenca del Ebro se comprometieron ayer, tras reiterar su rechazo a la venta de derechos, a buscar fórmulas para ahorrar agua con el objetivo de que no haya detrimento de caudal durante el periodo en que funcione el trasvase a Barcelona.
Así lo anunció el presidente de la Federación de Regantes de la Cuenca del Ebro, César Trillo, que descartó la posibilidad de que haya cesión o venta de derechos de agua y explicó que se trata de un acuerdo voluntario de los regantes, que deberá ser ratificado y concretado en una asamblea que se convocará en mayo.
Este acuerdo se alcanzó en la reunión que mantuvieron ayer representantes del Gobierno central, de la Generalitat catalana, la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) y de los regantes en la sede de este organismo.
Esta reunión se produjo después de que la Generalitat de Cataluña anunciara el pasado jueves que estudiaba la posible compra de derechos de agua a agricultores de otras comunidades ante la negativa de los regantes catalanes a ceder sus derechos para "equilibrar" el caudal del Ebro.
El secretario de Estado de Medio Rural, Josep Puxeu, declaró que el acuerdo permitirá hacer frente a la "gravísima sequía" de las cuencas internas de Cataluña que afecta a "la población no sólo de Barcelona sino de las áreas metropolitanas catalanas.
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