El Itxako necesita remontar cuatro goles para jugar su primera final de la Copa EHF

El Itxako Navarra se citará mañana con la historia al jugarse ante el Dunaferr húngaro la clasificación para la final de la Copa EHF, un objetivo al alcance del equipo navarro si es capaz de remontar los cuatro goles de desventaja tras el partido de hace una semana en Hungría. El Dunaferr ganó a las navarras por 27-23 en la ida de la semifinales el pasado domingo y, aunque sigue partiendo como favorito por su historial en competiciones europeas, el Itxako cuenta con opciones de alcanzar el sueño de su primera final tras tutear a las húngaras en su propia pista.

El conjunto dirigido por Ambros Martín dispone del factor campo a su favor al jugar el encuentro decisivo en el Pabellón Lizarrerria, arropado por su afición, una baza que ya se mostró importante en la anterior eliminatoria contra el Metz francés.

El Itxako recuperará, respecto al partido de ida, a la extremo navarra Naiara Egozkue, recuperada ya de una afección estomacal, aunque no podrá contar con la lateral brasileña Deonise Fachinello por una lesión muscular.

El técnico canario del Itxako, en declaraciones facilitadas por el club, ha destacado que será clave el trabajo defensivo: "Si recuperamos nuestro juego defensivo impidiendo que marquen más de 20 goles podemos superar la ronda", ha destacado.

"Jugamos en casa con el apoyo incondicional de nuestro público y esa es una ventaja que tenemos que aprovechar. Será fundamental mantener la concentración y saber superar la presión que el Dunaferr intentará trasladarnos durante todo el partido, pero sabemos cómo jugarles", ha comentado.

Ambros ha precisado, no obstante, que la clasificación para la final no es una tarea fácil: "Somos conscientes de que resulta muy complicado superar cuatro goles de desventaja en semifinales. El resultado del partido de ida no fue malo pero pudo haber sido mucho mejor, tendremos que mejorar", ha dicho.

El encuentro, de la vuelta de semifinales de la Copa EHF, se disputará a partir de las 18.00 horas en el Pabellón Lizarrerria de Estella (Navarra), con el arbitraje de los bielorrusos Andrei Gousko y Siarhei Repkin.