"El ayuntamiento sorprende si no has estado nunca en política"

Jesús Álava, ante la estatua situada junto al mercado de abastos de Tudela. BLANCA ALDANONDO

Fue Tudelano Popular en 2006, integrante del grupo Navarra Canta durante 17 años, fundador de la rondalla juvenil del barrio de Lourdes y autor de varios reportajes de imágenes de Tudela, su ciudad natal. El fotógrafo Jesús Álava Sesma, además, se estrenó esta legislatura como concejal regionalista aunque, según dice, no tiene ambiciones políticas.

"La única es, como tudelano, trabajar por mi ciudad, por la gente que nos ha elegido, y hacer todo lo posible porque UPN gane las próximas elecciones", dice.

¿Qué le animó a presentarse para ser concejal?

Siempre he estado haciendo algo, o así lo he creído , por las cosas de mi pueblo. Lo he hecho desde la música, con Navarra Canta; o desde la fotografía, con trabajos sobre la ciudad o recorriendo la ruta de Benjamín de Tudela. Fundamentalmente, lo que me animó a presentarme fue la posibilidad de trabajar por la ciudad desde otro ángulo, desde dentro del ayuntamiento. Pero es algo que voy a seguir haciendo esté o no en la política.

¿Le sorprendió que el alcalde, Luis Casado, le dijera que quería contar con usted?

Siempre sorprende, claro. No te lo esperas. Pero suelo reaccionar rápidamente. No lo tuve que pensar mucho. Cuando se me busca para trabajar en las cosas de mi pueblo estoy disponible, siempre que el tiempo me lo permita. Es una nueva etapa que empieza, como otras. Además, siempre he sido de los de dejarse arrastrar por la corriente a ver dónde me lleva, y hasta ahora me ha ido bastante bien. Tengo 45 años, y en este tiempo la verdad es que he "andado" bastante y tengo mi experiencia personal. Eso es lo que tengo que aportar.

Cuándo entró en el consistorio, ¿era como esperaba?

El que no ha estado nunca en política, cuando entra en el ayuntamiento, le sorprende. La crítica que se hace desde fuera del consistorio, cuando estás dentro, te cambia radicalmente. Ves que todo va mucho más despacio de lo que piensas, que hay un montón de filtros de temas burocráticos que hay que pasar y que te hacen ser mucho más lento. Pero bueno, al final las cosas salen. También hay que tener muy claro que tienes un plazo de 4 años para hacer las cosas, y no todas se tienen que hacer en el primero.

¿Qué ha sido lo positivo?

La vida es un aprendizaje continuo. En política voy a aprender y estoy aprendiendo muchas cosas. Tiene cosas buenas, cosas malas, pero, al final, creo que sigo siendo la misma persona que antes de las elecciones.

Lleva la concejalía de Turismo, Empleo y Comercio. ¿Era la que esperaba?

Creo que era la adecuada para mí. Por mi trabajo ya conocía a mucha gente. No soy un hombre de despacho. Es más, mis compañeros alguna vez se ríen porque en un año de legislatura no he encendido el ordenador. Me considero un hombre de calle y de encuentro continuo con la gente. Tengo una gran capacidad de recepción de ideas y de escuchar a la gente. Y lo que sí tengo es más amigos que antes.

¿Cómo compagina el trabajo y la labor de edil?

Con mucho sacrificio. Es complicado, pero lo voy llevando. Tudela ya no es un pueblo de hace 30 años, sino una ciudad que está creciendo. Necesitaría que los políticos que estén, no sabría decir si todos, tuvieran una profesionalización, una dedicación exclusiva hacia la ciudad, porque lo necesita. Creo que eso ha de venir con el tiempo. Necesitas realmente de todo el día, muchas veces más de 8 horas. Eso no lo sabe la gente, pero muchas veces hay que estar en reuniones de tarde, de mañana, etc.

¿Son todas necesarias?

El político tiene que dar una respuesta rápida al problema del ciudadano, y quizá falta agilidad. Es muy importante la colaboración entre el político y el funcionario. Hay muy buenos técnicos en el consistorio. Tengo la suerte de tener en mi concejalía unos técnicos muy capaces. Y pese a la burocracia administrativa, si hay 4 ideas claras, técnicos que nos apoyan y una decisión política, podemos hacer lo que queramos. Hay que ser ambicioso, y yo lo soy. Luego ya veremos dónde nos quedamos.