Un total de treinta y cinco niños entre 7 y 12 años de colegios de Burlada asisten diariamente a la asociación Lagundu Arakil de esta localidad para recibir clases de apoyo escolar. Las treinta y cinco voluntarias de la asociación que les dan clases de refuerzo y organizan otras actividades han sido premiadas por La Caixa por el trabajo solidario que llevan a cabo con estos niños inmigrantes y en riesgo de exclusión social. Una de las coordinadoras del centro, Arantxa Azcona; y cuatro voluntarias (Sonia Ginesta Ruiz de Azagra, Uxue García Labiano, Elena Murúa Gangutia y Edurne Ozcáriz Pereira) acudieron ayer al Parlamento a recoger su premio.
Uxue García, pamplonesa de 24 años y pedagoga de la asociación, explica las actividades del centro. "Entre semana, les ayudamos con las tareas; y los viernes, organizamos actividades de ocio y tiempo libre. Además, una vez al mes hacemos una salida, a patinar, a un museo..."
Además del apoyo escolar, también se busca que estos escolares (de 2º de Primaria a 1º de ESO) reciban una educación integral en valores. "Queremos que sean buenas personas. Trabajamos el valor de la amistad, la autoestima, la solidaridad o el compañerismo".
Lagundu Arakil se fundó hace once años y desde entonces se ha prestado apoyo escolar a más de 500 niños en riesgo de exclusión social de Burlada.
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