El pasado 1 de marzo, el parque de bomberos de la calle Aralar cumplió 50 años y es probable que su vida útil haya finalizado con esa edad. La construcción en Cordovilla del parque central de bomberos implicará la salida de los efectivos que se instalaron el 1 de marzo de 1958 en el edificio de la Media Luna. Junto a ellos, también se abrió el Parque de Desinfección, que permaneció en el mismo edificio hasta 1977, cuando se trasladó a los nuevos locales municipales de la calle Monasterio de Irache. El edificio de la calle Aralar sustituyó al utilizado hasta entonces por el retén de bomberos, en la calle Eslava, donde hoy se levanta la casa de baños municipal. El nuevo inmueble costó 1.950.000 pesetas. Casi 20 años después de su construcción, en 1977, el edificio fue sometido a varias reformas. La principal consistió en levantar una planta más sobre el garaje de los vehículos para destinarla a biblioteca, sala de estar, dormitorio y gimnasio para los bomberos. La salida del Parque de Desinfección permitió al grupo de dantzaris ocupar el local que quedó libre.
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