Los tres heridos más graves fueron derivados a centros sanitarios de Pamplona, los ocho restantes al Hospital Comarcal de Irún, donde relataban los momentos vividos
UNA mañana de sirenas alertó a muchos vecinos de Sunbilla. Hasta ocho vehículos desplazaron a los once heridos. El más grave, Francisco Ariztia, conductor del camión, fue derivado al Hospital de Navarra. Tras ser intervenido quirúrgicamente, quedó ingresado en la UCI, en estado crítico. Según el parte médico, presentaba traumatismo craneoencefálico, rotura de cúbito y luxación de cadera.
En el Hospital Virgen del Camino quedó ingresado Andrés Iriarte Iriarte, vecino de Elizondo de 50 años, chófer del autobús. Presentaba traumatismo craneoencefálico y su pronóstico era grave. En el mismo centro sanitario fue atendida Pilartxo Rodríguez Jiménez, religiosa Carmelita Descalza, del convento de Donamaría. Tiene 51 años, viajaba en el autobús y sufrió traumatismo torácico y policontusiones. En el Hospital de Irún atendieron a ocho personas; dos quedaron ingresadas: Karen Mendoza, de 26 años, con traumatismo en el sacro, y María Rosario Bautista, de 23 años, que tenía golpes en la espalda y las piernas y fue trasladada al servicio de neurocirugía del Hospital Donostia de San Sebastián para examen de un hematoma epidural.
El resto, fueron dados de alta: Agurtzane Alzaga Urkia, de 29 años y su hija Arane Izagirre Alzaga, de cuatro meses; Carmen Santorio Ballesteros, de 54 años; D.L.G., una mujer de 75 años; S.G.G., varón de 55 años y V.M.LL.V., también varón y de 32 años.
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