Asuntos Sociales estudiará si reforma o traslada Santo Domingo

Vista del antiguo convento de Santo Domingo de Estella, hoy residencia de ancianos. MONTXO A.G,

La residencia de ancianos de Santo Domingo de Estella se incluye entre las 90 actuaciones principales del Plan Navarra 2012 y lo hace como una de las novedades introducidas en la merindad de Estella. Asuntos Sociales destinará a este antiguo convento del siglo XIII 8,5 millones de euros, una cantidad que abre la puerta a las dos posibilidades que en este momento baraja el departamento.

O se emplea para una reforma integral o, si hacerlo así no fuera viable, se opta por la construcción de una nueva residencia.

En cualquier caso, la decisión no se tomará de momento puesto que el proyecto forma parte de la recta final del acuerdo de inversiones alcanzado el lunes por el Gobierno foral y el PSN. La planteada para Santo Domingo tiene el 2011 como fecha barajada, aunque Asuntos Sociales deja así constancia de la importancia de la residencia entre sus planes para futuro. Las dependencias que se plantea modernizar en Santo Domingo, con cerca de 110 plazas, datan de 1977.

Una reforma compleja

Desde el departamento que tiene al frente a Maribel García Malo se reconocía ayer la complejidad de una reforma que, dadas las características histórico-artísticas del edificio, precisaría en todo momento ir de la mano de Príncipe de Viana. "Si no se puede hacer una adecuación, habría que plantear un centro nuevo y ésa es una posibilidad en la que también trabajaremos", se indicó. Las mismas fuentes se referían a la imposibilidad de acometer esta actuación a corto plazo en un momento en el que, posibilidad financiera al margen, no se dispone de capacidad humana para sumar esta obra otras previstas desde Asuntos Sociales de forma inminente.

Respecto a la alternativa del traslado, no se apunta de momento a ningún emplazamiento concreto en Estella. Esta línea sí reabre, sin embargo, un debate recurrente en la vida ciudadana, el que ha apostado en repetidas ocasiones por proporcionar una residencia más céntrica a personas de movilidad limitada que, pese al servicio de autobuses existente, se encuentran a menudo con dificultades para acercarse a la ciudad desde Santo Domingo.