La semifinal enfrentará a las gemelas Pinedo

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Eli Pinedo (a la izquierda) y Patri Pinedo se verán las caras este sábado en la semifinal de la Copa. MONTXO A. G.

Fernando Ederra y su hija Silvia antes de jugar el partido. MONTXO A. G.

Son hermanas gemelas y las dos juegan por la izquierda. Eli Pinedo, como extremo, y Patri Pinedo, como lateral. Ambas disputarán mañana la semifinal de la Copa de la Reina, aunque no lo harán en el mismo siete inicial. La primera vestirá con el amarillo del Itxako y la segunda defenderá la camiseta del Akaba Bera Bera, vigente campeón.

Una tentadora oferta deportiva hace cuatro temporadas hizo que Eli abandonara las filas del equipo vasco, donde compartió vestuario con su hermana durante cinco años. Ahora, son rivales y, al margen de los compromisos de Liga, la Copa de la Reina les ha deparado verse las caras de nuevo en la pista. "Prefiero jugar con ella que contra ella, pero, en cuanto pita el árbitro, me olvido de que mi hermana está enfrente", explicó Eli.

Quienes no perderán de vista a ambas desde la grada serán sus padres, aficionados de ambos equipos. "Ellos están entre la espada y la pared. Son del Bera Bera desde siempre, pero nos animan a las dos. En Liga empatamos y se quedaron muy contentos al llevarnos cada una un punto", comentó.

Ahora, al menos una de las dos estará en la final. "Esto es lo positivo. Espero que pase mi equipo, pero si lo consigue mi hermana estaré muy contenta por ella", dijo Patri. Ambas conocen muy bien sus movimientos en la pista y las dos creen que tendrán a un duro rival enfrente el sábado. "Sé como juegan. Es un equipo muy fuerte, rápido y con un buen movimiento sin pelota. Arriesgan mucho y pierden balones, hecho que debemos aprovechar", explicó la del Itxako.

Además dijo que, a pesar de que comparten todas sus experiencias deportivas, son muy reservadas a la hora de desvelar cuestiones internas de cada equipo. "No nos chivamos nada, ni siquiera las jugadoras que están lesionadas, pero sí hablamos del juego de cada una y nos damos consejos mutuos", indicó la extremo. Precisamente fue a Patricia a quien pidió primero opinión su hermana cuando se le presentó la opciónde fichar por Ribarroja. "Me dijo que ni me lo planteara, decidí irme y lo que iba a ser un año se convirtió en tres, los dos últimos en Sagunto". Esta etapa ha sido clave en su progresión deportiva. Ahora sólo piensa en sumar un título con el Itxako. "Estamos vivas en todo y nos toca ganar algo", confió.