Un nuevo estudio realizado por varias universidades británicas sostiene que el rostro revela la predisposición a la promiscuidad a través de varios factores como la forma de la mandíbula, el tamaño de la nariz o la forma de los ojos. De esta forma, los hombres con rasgos viriles, como la mandíbula cuadrada, la nariz más grande y los ojos más pequeños que la media, fueron considerados más fácilmente por los encuestados como unos "donjuanes", proclives a relaciones amorosas cortas. En cuanto a las mujeres, aquellas cuyos rostros indicaban una disponibilidad sexual fueron consideradas más atractivas por los hombres y más guapas por las mujeres. COLPISA/AFP
© DIARIO DE NAVARRA. Queda prohibida toda reproducción sin permiso escrito de la empresa a los efectos del artículo 32.1, párrafo segundo, de la Ley de Propiedad Intelectual